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El equipo de Biden trata de entrometerse en el Tratado de Inversión entre China y la Unión Europea

25 de diciembre de 2020 – Desde hace tiempo se viene negociando un Tratado de Inversión entre la Unión Europea (UE) y China, y las negociaciones están llegando a una conclusión, en lo que se considera es un gran paso a la consolidación de la relación entre la UE y China. El Presidente Xi Jinping llamó por teléfono a la Canciller de Alemania, Angela Merkel, y habló también con otros funcionarios de la UE recientemente, a fin de subrayar la importancia del tratado. Ahora han surgido problemas de último minuto, fomentados principalmente por la oposición desde Estados Unidos, tanto del presunto gobierno entrante de Biden, como de la Casa Blanca actual. También han surgido quejas y gruñidos de algunos miembros de la UE, como Polonia, pero en realidad son secundarias con relación a la oposición al tratado que hay en Estados Unidos. 

El personaje postulado por Biden como Asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, tuiteó el 21 de diciembre que el nuevo gobierno “le daría su beneplácito a las consultas tempranas con nuestros socios europeos sobre nuestras preocupaciones comunes por las prácticas económicas de China”. Luego el diario New York Times informó que el vocero del Consejo de Seguridad Nacional de Trump, John Ullyot, dijo que cualquier compromiso con China “que no esté acompañado de una aplicación firme y mecanismos de verificación, es puramente una victoria propagandística” para el Partido Comunista Chino. Y un iracundo funcionario alemán dijo que la firma del tratado sería como dejar que Xi Jinping “le haga la señal con el dedo” al gobierno entrante de Biden. Algunos europeos han planteado el tema falaz del “trabajo forzado” en Xianjiang para terminar con las pláticas. 

Los esfuerzos de China para incluir más en la cooperación nuclear con Europa han encontrado mucha resistencia. La pandilla “atlanticista” (sumisa a la “relación especial” angloamericana) está obviamente fuera de control en este tema. Pero como lo señaló el embajador de Italia en China, Luca Ferrari, en un foro en Pekín, el próximo siglo no será un siglo estadounidense ni un siglo chino, sino que con toda seguridad será un “siglo del Pacífico”, en virtud de la influencia disminuida de la región transatlántica en la economía y la política mundial. 

Pero las pláticas han continuado y los negociadores esperan llegar a un acuerdo para fin de año. “Se ha avanzado en una serie de áreas”, dijo una declaración de la Comisión Europea. “Quedan aún algunas materias importantes pendientes y las pláticas continuarán esta semana”, agregó la declaración.

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