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Con cacerolazos a nivel nacional, en Brasil exigen renuncia de Bolsonaro por su respuesta desastrosa al COVID-19

17 de enero de 2021 — La noche del15 de enero simultáneamente a las 8:30 pm, ciudadanos de todo Brasil llevaron salieron a protestar con cacerolazos para exigir la renuncia del sicópata Presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, por su nefasto manejo de la pandemia del coronavirus. Consignas a voz en pecho de “¡Fuera Bolsonaro!”, y “¡Genocida!”, se escucharon por todo el país. Pero esto es apenas la punta del iceberg. 

En la ciudad de Manaos, capital del estado de Amazonas, la crisis es espantosa, pero también está ocurriendo lo mismo en otras ciudades del interior. Esta ciudad fue una vez un bastión de apoyo para Bolsonaro, pero ya no lo es. El sistema de salud se colapsó completamente; tanto los hospitales públicos como los privados se están quedando sin oxígeno y sin otros suministros médicos, y no tienen camas de cuidados intensivos u otras camas, para dar tratamiento a los pacientes de COVID-19, o a quienes les aqueja otro padecimiento. El diario O Globo informó que ciudadanos desesperados estuvieron haciendo fila toda la noche, esperando llenar sus tanques de oxígeno vacíos que necesitan para cuidar en casa a familiares enfermos de COVID. Un médico le dijo al diario El País, “esta no es la segunda ola, esto es un tsunami”. La nueva variante del COVID ya llegó a Brasil, cosa que complica la situación enormemente. 

El mismo 15 de enero por la noche, el ejército llevó por avión a varios pacientes de COVID de Manaos a São Luiz, ciudad que queda al norte del país, según informó la agencia Reuters. Asimismo, la fuerza aérea llevó de emergencia cinco tanques de oxígeno líquido, y se esperaba que al día siguiente llegaran otros diez tanques. Venezuela, que hace frontera con el estado Amazonas de Brasil, también le va a dar suministros de oxígeno de emergencia y otros suministros médicos a Manaos. El caso de Manaos es dramático, empeorado por el hecho de que es el estado que menos ayuda ha recibido del gobierno federal, en relación con el número de su población. Mientras tanto, Bolsonaro cacarea, “ya hicimos nuestra parte”. 

El total de casos de COVID-19 en Brasil, es de 8,39 millones de personas y 208.000 fallecidos. Las agencias de noticias, Télam y Ansa, informaron ayer que en 24 horas entre el 14 y el 15 de enero, fallecieron 1.113 personas por COVID, con lo cual promedio diario se eleva a 967; esto es 37% más alto que hace dos semanas. 

 

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