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“Especialistas” en sanciones económicas, una profesión en ascenso 

31 de marzo de 2021 — Las sanciones económicas que con toda razón denunció el ex senador estatal de Virginia, Richard Black, en la reciente conferencia del Instituto Schiller, como “la forma de guerra más cruel y bárbara que se pueda librar” en contra de las naciones, se ha convertido en algo tan importante para el sistema de la geopolítica imperial, que ser un “especialista en sanciones” se ha convertido en una carrera favorita. Esos especialistas fundaron su propia institución “profesional” en el 2018, la mentada “Asociación de Especialistas Certificados en Sanciones” (ACSS, por sus siglas en inglés), para ayudar a sus más de 1.000 miembros actuales de 40 a 50 países, a “construir una red y a crecer como profesionales en sanciones”, en un campo donde “abundan las oportunidades de hacer una carrera”.

El sitio electrónico de la ACSS (https://sanctionsassociation.org/about-us/) define sanciones como “abandono deliberado o amenaza de abandono del comercio habitual o de las relaciones financieras, por parte de un gobierno, contra un país con el objetivo de cambiar las políticas de ese país”, una definición tomada de A Short Survey of Economic Sanctions (Una breve encuesta sobre sanciones económicas) de Gary Hufbauer & Barbara Oegg, de agosto del 2001, que fue publicado por el Instituto Peterson de Economía Internacional, que parece ser que se divierte publicando estudios sobre cómo imponer sanciones.

En las décadas recientes Estados Unidos ha agrupado tantas sanciones en contra de países, pueblos, y entidades (presuntamente, el verdadero inicio de esta forma de guerra comenzó en la década de 1990), que la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC en sus siglas en inglés), del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, responsable de administrar e imponer sanciones económicas y comerciales, informa que no mantiene una lista específica de los países con los que tienen prohibido hacer negocios los ciudadanos de Estados Unidos, porque es demasiado complicado hacer eso. Hay programas específicos de sanciones actualmente activos en contra de 26 países y  “alrededor” de 6.300 personas, indica el sitio electrónico, pero eso no toma en cuenta los programas de sanciones más amplios impuestos a nombre de la lucha contra el terrorismo, la corrupción, la intervención extranjera en las elecciones de Estados Unidos, etc. “Debido a que los programas de la OFAC son dinámicos, es muy importante estar checando el sitio electrónico de la OFAC regularmente”, recomienda la  OFAC misma. “Garantizar que tu lista de sanciones esté actualizada y que tienes la información completa sobre los programas pertinentes de las restricciones más recientes, es una buena práctica y una parte crucial de tu responsabilidad y diligencia debida”, añade.

¡De ahí la “necesidad” de una mafia de “especialistas en sanciones” para manejar esta guerra!

 

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