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China y Cuba colaboran para crear una nueva y más compleja vacuna “Pan Corona” 

11 de abril de 2021 — El Centro de Biotecnología e Ingeniería Genética de Cuba (CBIG) está colaborando con el Centro Conjunto de Innovación y Desarrollo en Biotecnología de China ubicado en Yongzhou, en la provincia de Hunan, para producir una nueva vacuna, llamada Pan-Corona, para combatir el virus SARS-CoV-2, según informó el sitio cubano de noticias CubaDebate (en contra del terrorismo mediático) el 6 de abril. La vacuna en desarrollo se califica como de amplio espectro, lo que significa que sería efectiva contra muchas cepas diferentes del virus. El director de ciencias biomédicas del CBIG, Dr. Gerardo Guillén, explicó que aunque la nueva vacuna no debería ser considerada como una “súper vacuna”, es definitivamente más compleja que las ya existentes “porque es más difícil proteger contra diferentes cepas del coronavirus que todavía no se sabe cuáles van a ser”, declaró el científico el 26 de marzo, según informó la agencia china Xinhua.

China y Cuba han colaborado desde hace dos décadas y han establecido 5 empresas conjuntas de biotecnología. Con China, declaró el Dr. Guillén a la agencia Xinhua “podemos contar con la capacidad científica, de equipamiento, logística y de recursos, pero la base son las magníficas relaciones de amistad y de trabajo que realmente potencian la posibilidad del desarrollo científico”. Cuba aporta sobre todo su experiencia y desarrollo en el campo de la biotecnología, que es el sector principal y más pujante de la ciencia en la isla, desarrollado durante décadas, nacido de la necesidad de sobreponerse al bloqueo económico impuesto al país en 1962, que con frecuencia hace imposible la adquisición de suministros y equipos médicos. Cabe señalar lo que destaca la reseña de CubaDebate, de que por 26 años Cuba ha recibido 10 medallas de oro de la Organización Mundial de Propiedad Intelectual, por haber exportado sus productos biomédicos a 49 países.

Con cinco vacunas de coronavirus en desarrollo, dos de las cuales, Soberana2 y Abdala, están en la tercera fase de pruebas clínicas, Cuba ya está planificando ponerlas a la disposición de los países en desarrollo que no pueden pagar los precios que cobran las grandes compañías farmacéuticas. Fuera de Cuba, voluntarios en Irán y Venezuela están participando en las pruebas clínicas de la vacuna Soberana2, pero otros países, como México, Argentina, Vietnam, Pakistán, India y la Unión Africana (que representa a 55 países), ya han expresado su interés en adquirir la Soberana2 y otras vacunas cubanas una vez que las pruebas finalicen. Cuba establece precios variables a sus vacunas, dependiendo de la capacidad de pago de cada país.

 

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