Los británicos quieren un enfrentamiento estratégico de Estados Unidos contra China y Rusia
31 de mayo de 2021 — A medida que avanza el reloj para la cumbre programada para el 16 de junio entre los Presidentes Biden y Putin, los británicos aceleran sus esfuerzos para sabotear la cumbre, y más ampliamente, para orquestar un enfrentamiento estratégico mortal entre Estados Unidos por un lado y China y Rusia por el otro.
Ni la Casa Blanca ni el Kremlin creen que vaya a producirse ningún avance importante en la cumbre; en el mejor de los casos, cada uno de ellos ha declarado, para que conste, que se producirá un intercambio de opiniones y que las líneas de comunicación permanecerán abiertas. Pero incluso eso, es mucho más de lo que el imperio británico puede tolerar, y se han desplegado en consecuencia, tanto contra Rusia como contra China. Un vistazo superficial de los acontecimientos de las últimas 24 horas pinta un cuadro muy claro:
El ataque contra Rusia por la detención del neonazi Pratasévich en Bielorrusia se está intensificando. El presidente del parlamento de la Unión Europea, David Sassoli, ha pedido más sanciones contra Rusia, con el fin de ayudar a provocar un cambio de régimen. Dentro de Rusia detuvieron más terroristas ucranianos que intentaban crear un caos para derrocar a Putin. La inteligencia británica está tomando la delantera en el cuento de que “una filtración del laboratorio de Wuhan” fue lo que desató la pandemia. Y así por el estilo.
Por supuesto, en Occidente hay “realistas” que creen que el rumbo actual de confrontación con China y Rusia es innecesario y peligrosamente equivocado. De vez en cuando pueden expresar sus opiniones en los medios de comunicación convencionales. Pere ese “realismo”, aunque loable como sentimiento, no llevará a ninguna parte para impedir la confrontación de las superpotencias e incluso a la guerra, a menos que también se enfrente a la causa real del peligro de guerra: el colapso del sistema económico y político transatlántico.
Como lo especificó Lyndon LaRouche de manera singular, el peligro de guerra persistirá hasta que la City de Londres y Wall Street se sometan a una reorganización de bancarrota, y se establezca un nuevo sistema de crédito internacional para dar marcha a tras al medio siglo de descenso en la Densidad de Población Relativa Potencial del planeta mediante proyectos de infraestructura en el mundo. El más apremiante de estos proyectos es la construcción de un sistema salubridad avanzado en todas las naciones del mundo, para revertir la pandemia de Convid-19 y prepararse para probables virus futuros.
Como lo señaló la presidente del Instituto Schiller, Helga Zepp-LaRouche, en su última videoconferencia semana:
“Esperemos que haya una discusión positiva sobre cuestiones estratégicas [en la cumbre Biden-Putin] y otras cuestiones importantes como la pandemia, la crisis financiera y no solo el cambio climático y la agenda de la City de Londres y Wall Street.
“Creo que también es importante la declaración que hizo el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, en el sentido de que nadie debe esperar que una reunión positiva entre Estados Unidos y Rusia rompa de algún modo la relación entre Rusia y China.
“Creo que hay el potencial de que esta cumbre pueda ser un primer paso in la dirección correcta y, ojalá, la otra propuesta del Presidente Putin, de realizar una cumbre de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, que le hiciera seguimiento para abordar entonces las cuestiones realmente urgentes en el mundo. Pero es un proceso de construcción, así que creo que entre más gente hable del asunto, mejor, así que esperemos que funcione en la dirección correcta”. (Puedes ver la videoconferencia en este enlace: Videoconferencia con Helga Zepp-LaRouche, 29 may 2021: La Cumbre de Putin y Biden: un paso posible en la dirección correcta (larouchepub.com)).
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