Es necesario abordar la crisis de agua y de sequía de Asia Central

3 de agosto de 2021 — La sequía extrema que azota la región de la cuenca del Mar de Aral, ya escasa de agua, está generando una crisis para los 75 millones de habitantes de las repúblicas de Asia Central, una zona en la que se necesitan urgentemente grandes proyectos de gestión de agua, que llevan décadas sobre la mesa. Los relatos anecdóticos citados aquí indican el alcance de la crisis.

Kazajistán es el mayor productor de cereales en Asia Central, un importante exportador de trigo, y un importante productor de semillas oleaginosas y carne. Sin embargo, el 26 de julio, el gobierno se vio forzado a ordenar un prohibición total a las exportaciones de cultivos forrajeros (heno, avena, centeno y ensilado), y puso límites a la exportación de los cereales, comenzando el 15 de agosto, ya que no se puede sostener a los rebaños de animales en las tierras de pastoreo estériles arrasadas por la sequía. Más de 3.000 ovejas, vacas y caballos han muerto por la falta de agua y alimento solo en la región de Mangistau. En la región de Kyzylorda, el 90% de los pastos son inadecuados, a consecuencia de la falta de lluvia. El efecto en la agricultura para el mercado nacional también se manifiesta en el salto reciente de 700% en el precio del kilogramo de zanahorias, un alimento básico de la dieta local, informó Radio Free Liberty (RFL) la semana pasada, un aumento que, según RFL, no es atípico en la región.
Los cultivos, también se están marchitando en Kirguistán. Según el informe del 27 de julio de la RFL, el suministro eléctrico de Kirguistán está en peligro, puesto que gran parte de este suministro a nivel nacional es generado por medio de plantas hidroeléctricas. En estos momentos los funcionarios competentes advierten a los ciudadanos que se preparen para los apagones, “en particular a consecuencia de los bajos niveles de agua en los embalses y por las reparaciones que se están haciendo en la planta de generación hidroeléctrica más importante del país, Toktogul”, informó la RFL.
Lo mismo ocurre en Tayikistán: Muchos residentes de la tercera ciudad del país, Ozodi, ya no tienen agua en sus casas, y tienen que conseguirla en cubos y botellas de los grifos públicos para llevarla a sus apartamentos.

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