14 de marzo de 2022 (EIRNS) — Scott Ritter, un ex funcionario de inteligencia de la Armada que trabajó como inspector de armas de la ONU en Iraq, que tiene conocimiento sobre armas biológicas y excelentes fuentes en el ejército, echó por tierra el esfuerzo de Estados Unidos y Reino Unido por negar la revelación que hizo Rusia sobre los laboratorios de armas biológicas financiados y controlados por Estados Unidos en Ucrania. En una entrevista realizada por George Galloway en su canal MOATS TV, Ritter empezó indicando que el intento de Victoria Nuland y otros que alegan que los laboratorios eran para investigación, no para armas, es espurio. “Estados Unidos está caminando en una línea delgada con respecto a lo que es legal y lo que no lo es, según la Convención de Armas Biológicas y Toxínicas”. Señaló que el jefe de la Convención había advertido antes de la incursión rusa que existía el peligro de que si un laboratorio era bombardeado, y se cortaba la electricidad, las muestras de patógenos congelados se derritieran y se filtraran. Ritter explicó que varios de los laboratorios eran antiguos laboratorios de armas soviéticos, y los científicos guardan su trabajo. “Así que, sí. Estos son laboratorios de armas”. 

Dijo que esperaba que las fuerzas de Rusia utilizaran un poder abrumador, “que son totalmente capaces de hacerlo”. Pero no lo hicieron, y las familias ucranianas que siguen en el país han contado a sus familiares en el extranjero que los rusos han sido amables, e incluso se han retirado en varios casos en los que las fuerzas ucranianas contraatacaron una zona que habían ocupado porque no querían luchar en zonas civiles. Un general ruso dijo que estaban utilizando “las tácticas de Siria”, y no como afirman los medios de comunicación occidentales, arrasando Alepo, sino todo lo contrario, rodeándola y permitiendo que los yihadistas salieran en autobuses, para que no hubiera guerra urbana. Dijo que un equipo ruso de fuerzas especiales entró a Járkov a negociar el paso, pero el alcalde que lo negoció fue asesinado junto con el equipo ruso por la brigada Azov. 

Ritter cree que el tiempo para que Zelenski acepte las exigencias puede estar agotándose, y que los rusos podrían cambiar a tácticas de fuerza total. Zelenski es “bipolar”, un día ofrece un compromiso y al siguiente se hace pasar por un héroe. “Es controlado por el equipo de la CIA y el MI6. Su discurso ante el Parlamento de Reino Unido y ante el Congreso fue escrito por los controladores de la CIA y el MI6. Debería darles vergüenza al Parlamento y al Congreso permitir que sus agencias de inteligencia los utilicen para propagar tales mentiras”.