14 de abril de 2022 (EIRNS)  — El gobierno de Biden anunció el miércoles 13 el envío a Ucrania de más armas por un valor de $800 millones de dólares, con el fin de perpetuar el derramamiento de sangre en ese país e intensificar la guerra contra Rusia. 

El día anterior, el Presidente Joe Biden acusó al Presidente de Rusia, Vladimir Putin, de estar cometiendo "genocidio". Ese mismo día, la ministra de Asuntos Exteriores británica, Liz Truss, encabezó un coro internacional de acusaciones inventadas contra Rusia por, supuestamente, llevar a cabo ataques con armas químicas contra la ciudad de Mariúpol, sin aportar ni una sola prueba, y luego amenazó con que Putin "rendirá cuentas" y advirtió que Occidente tenía "todas las opciones sobre el tapete" contra Rusia. 

Eso fue ayer y antier. ¿Qué vamos a tener mañana? 

“Cada minuto, cada día, el mundo se acerca cada vez más al borde de la Tercera Guerra Mundial”, declaró Helga Zepp-LaRouche. Nos dirigimos hacia la tormenta perfecta de guerra, hambruna y caos social, a medida que las poblaciones desesperadas y enfurecidas reaccionan ante la desintegración sistémica del orden transatlántico. La bancarrota de la clase política de la casta dominante es tal, subrayó Zepp-LaRouche, que son manifiestamente incapaces de reflexionar sobre el hecho de que sus políticas pueden haber estado equivocadas. Pero su mundo unipolar está acabado, y la mayoría de las naciones del planeta lo reconocen de un modo u otro, a pesar de las amenazas y las tácticas de intimidación utilizadas contra ellas. 

Nos dirigimos hacia el derrumbe perfecto de todo el sistema, reiteró Zepp-LaRouche, a menos que se aborden a tiempo las cuestiones de fondo, a menos que las soluciones aportadas por Lyndon LaRouche a lo largo de medio siglo se pongan sobre el tapete para abrir un debate internacional inmediato e intenso, un proceso que se inició en la conferencia del Instituto Schiller del pasado fin de semana, 9 de abril, sobre la creación de una nueva arquitectura internacional de seguridad y desarrollo. 

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, acertó al centrar el asunto en el derrumbe del mundo unipolar. En su discurso el 12 de abril para el Día de la Cosmonáutica, dijo: "¿Qué vemos ahora? Vemos el colapso del sistema mundial unipolar que se desarrolló tras la desintegración de la Unión Soviética. Este es el punto principal. Lo principal no son los trágicos acontecimientos en Donbás y Ucrania; no son lo principal". 

Pero, ¿qué sustituirá a ese moribundo orden mundial unipolar? Putin hizo hincapié en las soluciones de futuro que se encuentran en la ciencia espacial y los avances en energía nuclear, para Rusia y todas las naciones. “Seguiremos desarrollando una nueva generación de naves espaciales de transporte y tecnologías de energía nuclear espacial, donde sin duda, hemos conseguido una muy buena ventaja y contamos con ventajas absolutamente evidentes... [Tenemos] fe en el futuro, en nuestro potencial y desarrollo progresivo y confianza en que ciertamente alcanzaremos todos nuestros objetivos. Estoy seguro de que así será”. 

Enseguida, Putin hizo la propuesta extensiva a todas las naciones: “Por lo tanto, trabajaremos con nuestros socios que quieran cooperar con nosotros. Trabajaremos en programas del espacio cercano y del espacio exterior, y también pondremos en marcha nuestro programa de exploración de la Luna”. (en.kremlin. ru/events/president/ news/68180). 

Este tipo de enfoque es la base necesaria para sustituir el orden mundial unipolar por un concepto que sitúe nuestra identidad en la humanidad única, con el fin de resolver las contradicciones entre las diferentes naciones.