3 de mayo de 2022 (EIRNS) — Una prominente operación ucraniana de asesinatos, Myrotvorets (“Guardianes de la paz”), que desde 2014 ha venido publicando una lista de “enemigos de Ucrania” que incluye los nombres, domicilios y números telefónicos de las personas que serán ejecutadas, ahora agregó dos jefes de Estado y de gobierno a lista, el Primer ministro de Hungría, Viktor Orban, y el Presidente de Croacia, Zoran Milanovic. Aparentemente, la banda neonazi Myrotvorets no había incluido antes a jefes de Estado o de gobierno. Entre los ucranianos que han asesinado entre 2014 y 2022 se cuentan la ejecución el 10 de marzo del ex subjefe del servicio de seguridad de Ucrania (SBU, por sus siglas en ucraniano) Dmitry Demyanenko, y más una decena de alcaldes ucranianos catalogados como “colaboracionistas”. Además de los asesinatos en sí, la lista se ha utilizado para intimidar, silenciar y aterrorizar. El parlamento unicameral de Ucrania, la Rada, se negó a suprimir la “lista de enemigos” cuando se lo solicitó la Organización de las Naciones Unidas. (Y por lo visto, los mismos funcionarios de la ONU en vez de denunciarlo al mundo, simplemente lo callan). 

Según la reseña de la cadena rusa Sputnik International, el nombre de Orban se incluyó porque Myrotvorets lo acusa de “cómplice de los criminales de guerra rusos”, de “complicidad en los crímenes de las autoridades rusas contra Ucrania y sus ciudadanos”, por su “participación en actos de agresión humanitaria contra Ucrania”, por ser “propagandista anti ucraniano”, y en general por su “cooperación con los agresores rusos”. Los delitos específicos de Orban consisten en su negativa a permitir que se utilizara el territorio de su país para entregar armas para Ucrania, y por su negativa a rechazar el suministro de gas ruso a largo paso; peor aún, Orban ha hecho los arreglos para pagar el gas ruso en rublos. Myrotvorets también le recuerda a Orban su declaración sobre la lucha de Hungría por la independencia, teniendo que enfrentarse a “los burócratas de Bruselas, el dinero y los institutos del imperio de Soros, los medios informativos internacionales, así como al presidente ucraniano”. 

El motivo para incluir a Milanovic es por ser “cómplice de los invasores rusos”, por “difundir la propaganda del Kremlin”, y por su “apoyo y justificación de la agresión rusa contra Ucrania”. También se cita el comentario de Milanovic de que Rusia debe ser “un factor” en la “ecuación” de la estabilidad en toda Europa. El vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitry Medvedev, escribió en su cuenta de Telegram: “A este ritmo, pronto los nazis ucranianos llevarán a cabo personalmente represalias contra los dirigentes objetables y ‘separarán las ovejas de las cabras’ directamente en las capitales europeas”. 

Después de un año de atacar a los periodistas que informaban sobre las actividades de las milicias en el Donbás, en 2015 también publicaron los datos personales de los militares rusos que participaban en la operación antiterrorista en Siria. Anton Herashchenko, actual asesor del Ministerio del Interior del régimen de Kiev, y ex viceministro del mismo, pidió al Estado Islámico que “se hiciera cargo” de las tropas rusas de acuerdo a las leyes de la Sharia islámica.