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Despliegue de las Fuerzas Armadas estadounidenses para arrastrar a Iberoamérica a la guerra planeada por la OTAN contra China

14 de enero de 2023 (EIRNS) — Un documento publicado ayer por Evan Ellis, experto de la Escuela de Guerra del Ejército de Estados Unidos en las relaciones entre Iberoamérica y China, con el título de “El papel estratégico de América Latina en un conflicto global por Taiwán”, revela que los militares estadounidenses han sido asignados para asegurar los recursos naturales, de infraestructura y científicos de Iberoamérica y el Caribe para Estados Unidos en su campaña bélica contra China, y negárselos a esas naciones y a la Iniciativa de la Franja y la Ruta.  (revistas.ceeep.mil. pe/index.php/seguridad-y-poder-terrestre/article/view/21/34)

La premisa del artículo de Ellis, publicado en español e inglés en Seguridad y Poder Terrestre, la revista del Centro de Estudios Estratégicos del Ejército Peruano (CEEEP), es que habrá una guerra de Estados Unidos con China por Taiwán, probablemente en el 2027, y que esa guerra será global. Por lo tanto, el Comando Indo-Pacífico de Estados Unidos necesita mapear (“anticipar”) las piezas con las que cuenta China “en otras partes del mundo, incluido el hemisferio occidental, [que] podrían afectar a la capacidad de Estados Unidos para desplegar y mantener fuerzas en el Indo-Pacífico en el contexto de un conflicto de este tipo”, escribe Ellis.

La amenaza para los demás gobiernos de las Américas es clara: los planificadores bélicos estadounidenses consideran que cualquier proyecto comercial o de infraestructura en el que participe China es de “uso dual” (o sea, tanto civil como militar), y por lo tanto hay que ponerle fin. Las actividades diplomáticas chinas y las relaciones interpersonales son ventanas a través de las cuales China puede recabar información y ganar influencia, según Ellis; China podría convencer potencialmente a estos gobiernos para que se mantuvieran neutrales en un conflicto entre Estados Unidos y China. Los numerosos proyectos de infraestructura de la región podrían ser utilizados por China en el conflicto mundial previsto como "bases de operaciones intermedias" para ataques contra el suministro estadounidense de alimentos y minerales críticos, o quizá directamente contra el territorio estadounidense, alega Ellis. El puerto peruano de Chancay se encuentra entre los puertos y canales considerados específicamente como una amenaza.

Ellis considera como un “imperativo” que los mandatarios de Latinoamérica y los planificadores militares “anticipen cómo la región… pudiera convertirse en objeto de lucha” en ese conflicto. “A los dirigentes políticos y a otros actores de la región les interesa considerar cómo las interacciones militares con el Ejército Popular de Liberación (de China), así como los proyectos comerciales con empresas con sede en la República Popular China... en sectores estratégicos como puertos, el espacio y el ámbito digital, pueden contribuir indirectamente a la forma en que los chinos podrían tratar de aprovechar las oportunidades creadas por dichos proyectos”.

Negar la cooperación de Iberoamérica con China en materia espacial es uno de los principales focos de ataque. El grupo de trabajo espacial China-CELAC, los cinco satélites meteorológicos y de vigilancia de la Tierra chino-brasileños del programa CEBRES, los satélites bolivianos y venezolanos desarrollados y desplegados conjuntamente con China, el radar de espacio profundo de Argentina en Neuquén, la participación de Perú en la Organización de Cooperación Espacial Asia-Pacífico, se citan como objetivos, además de la cooperación china en los observatorios astronómicos de la región.

Ellis llega a advertir que si uno o varios países más de la región rompen relaciones con Taiwán y reconocen a la República Popular China, ello podría precipitar una acción militar china para “retomar” Taiwán. (Ocho de las naciones que todavía reconocen a Taiwán están en esta región). A Ellis le preocupa que un nuevo gobierno tome la presidencia en Haití, porque en entrevistas extraoficiales con expertos haitianos en octubre del 2022, descubrió que de “la mayoría de los actores interesados en sustituir a Ariel Henry, Primer ministro no electo de Haití, todos quieren reconocer a la República Popular China”. Tal vez por eso el gobierno de Joe Biden ha mantenido en el poder al narcotraficante Henry para que continúe el genocidio que se está llevando a cabo en ese país. (revanellis. com/The%20Strategic%20 Role%20of%20Latin%20 America%20in%20a%20 Global%20Conflict%20 over%20Taiwan%20-%20R%20Evan%20Ellis.pdf).

 

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