24 de enero de 2023 (EIRNS) — Alberto Fernández, Presidente de Argentina, le dio la bienvenida a Luiz Inacio da Silva, Presidente de Brasil, este lunes 23 en Buenos Aires donde sostuvieron todo un día de reuniones bilaterales y la firma de una declaración conjunta de 82 puntos en la que se esbozan las múltiples áreas en las que ambas naciones se proponen revitalizar su cooperación. El viaje de Lula, que tuvo lugar en vísperas de la reunión de jefes de Estado de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, integrada por 33 países, a la que Lula también asistirá, despertó gran entusiasmo y expectación en Argentina. 

Como declaró Lula después de que ambos mandatarios terminaran de firmar varios acuerdos, “hoy estamos recuperando una relación que nunca debió romperse”. Bajo el gobierno brasileño del 2018 al 2022, del Presidente neoconservador, Jair Bolsonaro, la relación bilateral quedó muy dañada, al igual que las relaciones de Brasil con la CELAC (de la cual se retiró Bolsonaro) y con otras organizaciones de integración iberoamericana. Lula y Fernández prometieron resucitar la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), y revitalizar el Mercado Común del Sur (Mercosur), pero no se hizo mención al BRICS durante sus discusiones públicas, a pesar del hecho de que Argentina solicitó formalmente ser miembro del grupo de cinco países (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica). 

Luego de una reunión bilateral, se unieron a Lula y Fernández sus ministros de Relaciones Exteriores y de Finanzas, y los embajadores de cada país para finiquitar los detalles sobre los acuerdos específicos que habrían de firmarse. Los ministros correspondientes firmaron Cartas de Intenciones para la cooperación bilateral en los ámbitos de defensa, ciencia y tecnología, sanidad, integración económica y financiera, energía, educación, cultura y cooperación antártica. En un documento conjunto firmado por los dos Presidentes y publicado en el diario argentino Perfil el 22 de enero, ambos subrayaron también que la reindustrialización de sus economías, la construcción de proyectos de infraestructura conjuntos y la cooperación en los usos pacíficos de la energía nuclear y en el sector espacial eran prioridades de primer orden. 

En los próximos meses, los ministerios brasileños y argentinos perfeccionarán las cartas de intención para incorporarlas a un “Plan de Acción [oficial] para el Relanzamiento de la Alianza Estratégica Argentina-Brasil”. Lula invitó a Fernández a una visita oficial a Brasil para junio, momento en el que se espera que ambos Presidentes aprueben este documento. 

Antes de la visita de Lula, los medios de comunicación habían especulado mucho sobre si Lula y Fernández discutirían la creación de una moneda común para impulsar el comercio y reducir la dependencia del dólar. Cuando el Financial Times le preguntó al respecto, al ministro de Economía de Argentina, Sergio Massa, este dijo que primero se decidiría, “empezar a estudiar los parámetros necesarios para una moneda común, que incluyen desde cuestiones fiscales hasta el tamaño de la economía y el papel de los bancos centrales. Sería un estudio sobre los mecanismos de integración comercial. No quiero crear falsas expectativas... es el primer paso de un largo camino que América Latina debe recorrer”. Explicó que en un principio, se trataría de un proyecto bilateral y, posteriormente, se ofrecería a otras naciones latinoamericanas.