Go to home page

Un año después del atentado contra Nord Stream: ¿A quién o a qué apunta la guerra?

27 de septiembre de 2023 (EIRNS) — Hace un año, una serie de explosiones destruyeron el gasoducto Nord Stream que suplía de gas ruso a Alemania y una de las dos líneas del gasoducto Nord Stream 2. Este acto de terrorismo, sin paralelo alguno hasta ahora, en contra de una infraestructura civil de suministro de energía contribuyó a iniciar un invierno enormemente costoso para Alemania y Europa en general; los costos de la energía se dispararon en órdenes de magnitud por varios meses. Las industrias dependientes del consumo intensivo de energía han estado saliendo de Alemania, reubicando la producción principalmente en China y Estados Unidos. Con un costo acumulado de más de cien mil millones de euros, cabría esperar que Alemania actuara con rapidez para encontrar a los culpables, pero la verdad es esencialmente la contraria.

En un nuevo artículo que publicó en el aniversario de los ataques, el periodista Seymour Hersh dice que el blanco eventual de los ataques que destruyeron el gasoducto Nord Stream no era Rusia, pero de hecho, era Alemania, y Europa. “El gobierno de Biden hizo explotar los gasoductos, pero este atentado tuvo poco que ver con ganar o detener la guerra en Ucrania”, dice Hersh. “Fue el resultado de los temores en la Casa Blanca de que Alemania vacilara y reanudara el flujo de gas procedente de Rusia... Y así surgió el temor definitivo: que Estados Unidos perdiera su primacía de siempre en Europa Occidental”.

Cuando el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, amenazó a Rusia el 7 de febrero del 2022 con que "si Rusia invade... ya no habrá Nord Stream 2. Le pondremos fin”, estaba hablando en una conferencia de prensa con el Canciller de Alemania, Olaf Scholz, quien explicó que él estaba en estrecha sintonía con Estados Unidos: "Actuamos juntos. Estamos absolutamente unidos". Más tarde, ese mes, Putin lanzó su operación militar especial en Ucrania. Pero los gasoductos no fueron destruidos sino varios meses más tarde. ¿Por qué? ¿Existía el temor de que se produjera un acercamiento? ¿Que el mundo se levantara para exigir la paz y el reconocimiento de las preocupaciones rusas en materia de seguridad? Al destruir el gasoducto, se cortó de tajo una importante posibilidad de cooperación entre Alemania y Rusia.

Este aniversario llega cuando la Organización de las Naciones Unidas (ONU) está concluyendo su Debate General del 2023, en el que un coro creciente de naciones insiste en que debe imponerse un nuevo paradigma en el mundo. "Se acabaron los días en que unos pocos países marcaban la agenda y esperaban que los demás se alinearan", afirmó el representante de India, la nación más poblada del mundo. "En nuestras deliberaciones, a menudo abogamos por la promoción de un orden basado en reglas. De vez en cuando, también se invoca el respeto a la Carta de la ONU. Pero por mucho que se hable, siguen siendo unas pocas naciones las que marcan la agenda y tratan de definir las reglas. Esto no puede continuar indefinidamente. Tampoco se quedará sin que sea cuestionado... Cuando la realidad se aleja de la retórica, debemos tener el valor de denunciarlo". El Primer ministro del vecino Pakistán advirtió que, a pesar de las necesidades de desarrollo en el mundo, "las tensiones entre las potencias mundiales han seguido en escalada. Vemos el surgimiento de nuevos y viejos bloques militares y políticos. La geopolítica está resurgiendo cuando la geoeconomía debería tener la primacía en el mundo".

Mientras tanto, cuando Canadá ovacionó a un voluntario de las SS en la Cámara de los Comunes, reforzó drásticamente el argumento de Putin de que la desnazificación era uno de los objetivos de Rusia en Ucrania. Esto ha llamado de nuevo la atención sobre la viceprimera ministra Chrystia Freeland, que sostuvo un símbolo de la OUN-B (Organización de Nacionalistas Ucranianos, aliada de los nazis en la Segunda Guerra Mundial) en un mitin, y cuyo abuelo —que la inició en la Plast, la organización de escultismo ucraniana— escribía para un periódico nazi. Polonia, país que sufrió enormemente a manos de personas como el huésped del parlamento canadiense, tan grotescamente honrado y ovacionado por ese dominio de la Mancomunidad británica, denunció la parodia: "Se trata de una persona que participó en una organización que tenía como blanco a los polacos, que cometía asesinatos en masa de polacos, no sólo del personal militar, sino también de civiles", declaró el embajador de Polonia en Canadá. Aunque, para empezar, el soldado "no debería haber aparecido en ningún lugar público", sin duda debería "ser procesado por lo que hacía su unidad" durante la Segunda Guerra Mundial.

Es gratificante comprobar que el que se aplauda a los nazis (al menos, a algunos de ellos) supone cruzar una línea. Pero entonces, ¿por qué se acepta el financiamiento de esos nazis?

En la ONU, el representante de Bielorrusia dijo que el pueblo ucraniano "se ha convertido en un peón en el gran juego de Occidente para preservar su hegemonía mundial". Pero a medida que los peones son capturados, con un mínimo de pérdidas para los rusos, se cierne una amenaza mayor: la escalada de ataques sobre el territorio de Rusia, con armas suministradas, mantenidas y quizás incluso operadas por países de la OTAN. El objetivo es llevar a Rusia al paredón, aumentar la presión hasta forzar una reacción contraria que amenace al mundo en un juego que supone una carrera nuclear. El deterioro de la situación de seguridad en torno a Nagorno-Karabaj es otro flanco contra la estabilidad regional, y una de las seis opciones para contener a Rusia, que se expone en el informe del 2019 de la RAND.

En este contexto, el llamado hecho por expertos militaros sensatos de Occidente de que hay que “poner fin a la guerra con una paz negociada” adopta un nivel de urgencia mayor. La OTAN se prepara para una guerra mundial; expertos militares y en política exterior emiten una propuesta: "Poner fin a la guerra con una paz negociada" (nationbuilder.com)

El mundo necesita no sólo un modus vivendi de coexistencia gestionada, sino un sistema en el que cada uno se dedique al beneficio del otro. El ministro de Asuntos Exteriores de India, S. Jaishankar, expresó este cambio en el papel concebido por India en la escena internacional:  "Desde la era del no alineamiento, ahora hemos evolucionado a la de Vishwa Mitra [amigo del mundo]".

 

Para mayor información escriba a preguntas@larouchepub.com

 

Volver    Volver al inicio

clearclearclear