1º de marzo de 2024 (EIRNS) — Según una encuesta reciente de la Universidad de Quinnipiac, el 21% de los encuestados cree que "preservar la democracia" es su principal preocupación, por encima de otras cuestiones como la economía y la delincuencia. 

¿Qué significado tiene esta frase? 

La campaña de reelección de Biden califica a Trump de "amenaza existencial para la democracia", lo identifica como alguien que "quiere ser un dictador" y ensalza la defensa de la democracia como "la cuestión más urgente de nuestro tiempo". 

"Que la democracia siga siendo la causa sagrada de Estados Unidos es de lo que se trata en las elecciones de 2024", dijo el Presidente, como destaca Nat Perry en su artículo para Consortium News sobre el papel de la "democracia" en las elecciones. 

Mientras tanto, cada vez más estadounidenses creen que tienen poca capacidad para influir en la política pública. Las encuestas muestran que el 85% de los estadounidenses piensa que el elevado costo de las campañas políticas impide que se presenten buenas personas. 

La mayoría de los estadounidenses cree que el duopolio demócrata-republicano dirige tan mal el país que "hace falta un tercer partido mayor". 

Una encuesta del 2022 reveló que sólo el 33% de los liberales creían que podían influir sustancialmente en la política, y un 22% aún menor de los conservadores. 

Mientras tanto, los principales defensores de la "democracia" han dedicado grandes esfuerzos a mantener a su adversario político fuera de las urnas, en los tribunales y, definitivamente, fuera de la Casa Blanca. 

En su intervención en la Conferencia de Acción Política Conservadora, la ex candidata presidencial Tulsi Gabbard afirmó que la política demócrata para las elecciones está "destruyendo nuestra democracia y arrebatándonos nuestra libertad". La casta dominante está actuando "para impedir que nosotros, el pueblo estadounidense, tengamos algo muy sencillo: la libertad de elegir a quien queremos que sea nuestro próximo Presidente". 

Por importante que sea este debate, omite algo de lo más decisivo: ¿qué acciones ajenas a las elecciones presidenciales puede emprender hoy el pueblo de Estados Unidos para cambiar la política de la nación? Diane Sare y José Vega se presentan a las elecciones. Otros eligen, cada día, hablar en las reuniones del consejo municipal, en los ayuntamientos, en las esquinas de las calles y en las reuniones comunitarias. 

Que te priven del derecho a votar por Donald Trump (que no es definitivamente ningún Abraham Lincoln) sí que es antidemocrático; ¿cuánto más antidemocrática es la perezosa decisión de concentrarse en unas elecciones presidenciales en lugar de actuar personalmente hoy?