3 de marzo de 2024 (EIRNS) — El destacado economista ruso Serguéi Glazyev hizo un llamado para que el Nuevo Banco de Desarrollo (NBD) del BRICS desempeñe el papel principal en el establecimiento de una nueva moneda que sustituya al sistema financiero internacional quebrado  basado en el dólar. Glazyev, ministro de Integración y Macroeconomía de la Comisión Económica Euroasiática (CEE), el órgano ejecutivo de la Unión Económica Euroasiática (UEEA), fue entrevistado por el periodista Pepe Escobar, que publicó el intercambio en Sputnik el 28 de febrero. 

Glazyev explicó que el proceso de desdolarización y el paso al comercio en monedas nacionales ha avanzado sustancialmente en los últimos 2 a 3 años, pero el reto central sigue siendo: ¿Cómo construir una nueva arquitectura financiera, con una nueva moneda, que pueda funcionar para el comercio, la liquidación de cuentas y, lo que es más importante, la inversión productiva a escala mundial? Para la moneda, Glazyev propone un modelo de "dos cestas" que vincule precios estables para las principales materias primas con base en contratos a largo plazo entre los Estados (no en el mercado especulativo de futuros), junto con una cesta de monedas participantes, como las de las naciones del BRICS. 

Pero, precisó, "hace falta alguien responsable. En el BRICS existe una organización de este tipo: el NBD. Si los jefes de Estado deciden designar al NBD como institución encargada de elaborar el nuevo modelo, la nueva moneda, y deciden organizar una conferencia internacional con el borrador de un tratado internacional, esto puede funcionar. El problema es que el NBD funciona, según el acta constitutiva, con el dólar. Tienen que reorganizar esta institución para que funcione. Ahora funciona como un banco de desarrollo internacional ordinario bajo el marco estadounidense" del dólar. 

Glazyev señaló que los Presidentes de Rusia, Brasil y Sudáfrica han declarado que es necesario construir una nueva arquitectura financiera, pero los bancos centrales de las naciones BRICS son un obstáculo importante, ya que insisten en que cualquier acuerdo tiene que mantener el papel central del dólar. Por esta razón, los debates sobre su propuesta y otras similares se mantienen a nivel "técnico", pero aún no han sido aprobados a nivel "político" por los jefes de Estado y sus ministros de Finanzas. 

Escobar le preguntó directamente cómo ha sido recibida su propuesta y cuáles son los obstáculos. Glazyev fue tajante: 

"La presentamos a expertos chinos, a nuestros socios de la Universidad Renmin. Tuvimos una buena acogida, pero no tuve la oportunidad de presentarla a nivel político. Aquí en Rusia promovemos el debate mediante ponencias, conferencias y seminarios, pero aún no hay una decisión política sobre la introducción de este mecanismo, ni siquiera en la agenda del BRICS. La propuesta de nuestro equipo de expertos es incluirlo en el orden del día de la cumbre del BRICS del próximo octubre en Kazán. El problema es que el Banco Central ruso no está entusiasmado". 

"Estamos haciendo todo lo posible", continuó Glazyev. "No estoy seguro de que el Ministerio de Finanzas entienda lo serio que es esto. El Presidente lo entiende. Yo personalmente le promoví esta idea. Pero el presidente del Banco Central y los ministros siguen pensando con el viejo paradigma del FMI". 

"Traté este tema con la señora Rousseff [la ex Presidente de Brasil, que actualmente preside el NBD] en el Foro de San Petersburgo. Le entregué un documento sobre el tema. Se mostró bastante entusiasmada y nos invitó a venir al NBD. Pero después no hubo seguimiento. El año pasado todo fue muy difícil... Dilma [Rousseff] debería encontrar tiempo para organizar estos debates a alto nivel. Se necesita una decisión política". 

Glazyev se quitó los guantes contra quienes se oponen a construir una nueva arquitectura financiera. "Parten de la base de que el statu quo actual es el mejor... La arquitectura financiera internacional que crearon Estados Unidos y Europa es cómoda. Todo el mundo sabe cómo funcionar en el sistema. Así que es imposible pasar de este sistema a otro... La gente ha sido educada en el paradigma del equilibrio financiero, totalmente libertario. No les importa que los precios estén manipulados por especuladores; no les importa la volatilidad de las monedas nacionales. Les parece natural... Es una especie de secta religiosa. Las sectas religiosas no crean innovación". 

Escobar resumió la entrevista: "La conclusión sucinta y esencial de las serias advertencias de Glazyev es que correspondería al NBD, impulsado por el liderazgo del BRICS, organizar una conferencia de expertos mundiales y abrirla al debate público”.