16 de marzo de 2024 (EIRNS) — En la rueda de prensa conjunta con el canciller alemán, Olaf Scholz, en Berlín el 11 de marzo, el Primer ministro de Malasia, Anwar Ibrahim, dio una lección pública a Scholz, después de que éste dijera que la política de Alemania sobre Gaza no cambia: Israel tiene derecho a la autodefensa, la solución es la liberación de los rehenes, la ayuda humanitaria y una solución de dos Estados. 

Scholz añadió en la rueda de prensa de 33 minutos que Alemania tiene una relación especial con Israel y que la mantendrá. "No es ningún secreto que nuestra perspectiva sobre el conflicto de Oriente Medio es diferente a la de los demás", dijo Scholz. "Pero eso hace que sea aún más importante intercambiar puntos de vista entre nosotros. En cualquier caso, estamos de acuerdo en que debe llegar más ayuda humanitaria a Gaza. Este es también nuestro claro llamado a Israel, que tiene todo el derecho a defenderse de Hamás. No creemos que una ofensiva terrestre sobre Rafah sea lo correcto".

Anwar respondió a un periodista diciendo que se alegraba de que el Canciller apoyara la solución de los dos Estados, pero que no había que olvidar 40 años de atrocidades ocurridas antes del 7 de octubre. Según el vídeo de la rueda de prensa publicado por Middle East Eye, Anwar respondió, hablando claramente en inglés: "No se puede encontrar una solución siendo tan unilateral en términos de mirar sólo un asunto en particular y borrar 40 años de atrocidades. La solución no es sólo liberar a los rehenes. ¿Qué pasa con los asentamientos? ¿Qué pasa con el comportamiento actual de los colonos? Continúa a diario. ¿Qué pasa con los despojos? ¿Sus tierras, sus derechos, su dignidad, sus hombres, sus mujeres, sus niños? ¿No nos preocupan? ¿Dónde hemos dejado nuestra humanidad? ¿Por qué esta hipocresía? ¿Por qué esta actitud selectiva y ambivalente hacia una raza y a otra? ¿Es porque son de color o tienen una religión diferente? Pero yo, desde luego, no puedo aceptar el hecho de que cuando se debaten asuntos particulares, sólo nos limitemos a un incidente concreto y a una víctima, olvidando los miles y miles de miles de víctimas de la Nakba (catástrofe) de 1947 y 1948".