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La ministra de Relaciones Internacionales y Cooperación de Sudáfrica lleva la humanidad y el arte de gobernar a Washington

20 de marzo de 2024 (EIRNS) —  La ministra de Relaciones Internacionales y Cooperación de Sudáfrica, Grace Naledi Pandor, habló ayer en la Fundación Carnegie para la Paz Internacional, en una mezcla poco común, para Washington, del arte de gobernar, la dignidad y la moralidad. 

El formato consistió en que ella respondiera a las preguntas del diplomático de carrera de Carnegie, Dan Baer, principal vicepresidente de investigación política,  quien claramente veía a Pandor y a Sudáfrica a través de un viejo prisma, el de un papel secundario en los asuntos geopolíticos. Para empezar le pidió a Pandor que calificara el liderazgo político de Estados Unidos, y respondió: "Lo califico con un 6 para el ejecutivo y por debajo de eso para la legislatura... No estoy segura de que los legisladores entiendan a Sudáfrica... Creo que sacan conclusiones sobre las relaciones internacionales de Sudáfrica, sin hablar necesariamente con nosotros. Y esto es muy preocupante... Si tuviera que hacer una declaración sobre su política, al menos hablaría primero con ustedes, e intentaría comprender cuál puede ser la causa, si es que la hay, de una disonancia emergente". 

Pandor planteó que "no necesitamos más organismos multilaterales" que sustituyan a las Naciones Unidas, pero que la ONU debe reformarse para ser "algo más que un órgano de supervisión... Tenemos que considerar la capacidad [de la ONU] para hacer respetar la paz. Tenemos que encontrar la manera de proteger a los inocentes cuando hay un conflicto". 

Criticó la estructura del Consejo de Seguridad de la ONU, y dijo que India y otros países deberían tener poderes similares a los de los cinco miembros permanentes: Estados Unidos, Reino Unido, Francia, China y Rusia. "Creo que debemos examinar la composición y el funcionamiento, así como la capacidad que está asociada a la existencia de un Consejo de Seguridad. Creo que deberíamos tener presencia de África como miembros permanentes... También creo que Asia del Este debería estar representada. Y considero que el hecho de que India sea tan grande y no forme parte de los miembros permanentes es una extraña realidad". 

Más adelante objetó la caracterización que hizo Baer de que "el BRICS invitó a seis nuevos miembros, cuatro de los cuales son regímenes autoritarios". Pandor no se inmutó: "¿Quién hace estos juicios?". El público respondió con risas y aplausos ligeros. "Esta evaluación que usted hace”… Baer la interrumpió diciendo "¿Desafiaría la premisa de que Irán, por ejemplo, es un régimen autoritario?". Pero  Pandor no se iba a amilanar: "¿Es acaso su papel hacer ese juicio?". Baer respondió: "No creo que sea yo quien lo diga. Es ampliamente considerado así por la mayoría de la gente". Pandor continuó: "No sé si son un régimen autoritario. Sí sé que"… Y Baer interrumpió a de nuevo su invitada: "¿La ministra de Sudáfrica no sabe si el régimen de Irán es autoritario?". 

Pandor: "No tengo esa definición en mi cuaderno de bitácora. Me preocupan las mujeres y sus derechos en Irán, y es algo que he tratado con el gobierno iraní, en particular con mi colega, el ministro de Asuntos Exteriores... Y utilizar nuestro éxito democrático [el de Sudáfrica] para decir que esto funciona de verdad... porque si dejamos de hablar con todo el mundo, porque los definimos de una manera determinada, creo que los modelos que hemos adoptado no tendrían ningún sentido... Utilizamos nuestro progreso posterior al apartheid como una forma de ser ejemplo para los demás de que creemos que es una buena práctica a adoptar". 

Baer comentó: "Es difícil argumentar que el ejemplo de Sudáfrica está al alcance de la gente en Irán o China, o en Arabia Saudita". 

Pandor: "No somos una democracia perfecta ni mucho menos... Tenemos enormes problemas de pobreza... que se derivan de nuestra historia... que no hemos podido abordar plenamente como democracia emergente. Pero sí creo que es una fuerza poder hablar con todo el mundo, porque si te cierras, no creo que consigas nada". 

Luego de criticar a Sudáfrica por la demanda contra Israel por el genocidio perpetrado contra los palestinos de Gaza, ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), Baer preguntó "qué pretendía conseguir Sudáfrica al llevar su demanda ante la CIJ sobre Gaza. Y ¿cómo concilia Sudáfrica eso con abstenerse en las resoluciones de la ONU con respecto a la agresión de Rusia a Ucrania? Usted ha hablado convincentemente de la necesidad de que la ONU responda a la matanza de civiles inocentes, y ciertamente eso está ocurriendo en Ucrania. ¿Cómo ve Sudáfrica la conexión entre ambas posiciones?". 

Pandor: "Sobre Gaza, y lo que esperamos conseguir, lo primero es detener la matanza de palestinos inocentes, y lo que hemos visto, lo que cada uno de nosotros ve cada día, sin duda hace que nos horroricemos de nosotros mismos, y de nuestra incapacidad para detenerlo. Así que esperábamos eso de la Corte Internacional de Justicia, gracias al respeto de la misma". Luego dijo con énfasis: "Que como una de las instituciones de derecho internacional a través de las medidas provisionales... reduciría el daño... Sabíamos que tal vez no detendríamos el conflicto en su totalidad, pero si podíamos reducir los daños a la población civil y hacer llegar la ayuda humanitaria, eso nos haría felices". Aparentemente, cuanto más describía Pandor el caso de Gaza, más se movía Baer incómodo en su asiento mientras se rascaba la cabeza. 

Pandor continuó: "Las medidas provisionales han sido ignoradas por Israel, ahora estamos viendo la inanición generalizada, y la hambruna ante nuestros propios ojos... Creo que como humanidad tenemos que vernos a nosotros mismos con horror". Luego en referencia a la actitud desafiante de Israel para cumplir ninguna ley, agregó:  "ha licencia, puedo hacer lo que quiera, y no ser detenido... En el momento en que permites algo así, lo que estás haciendo es poner en marcha una forma de proceder que será muy difícil de desafiar en el futuro. Acudimos a la CIJ porque los que conocen la democracia mejor que nosotros siempre nos han dicho que debemos respetar los derechos humanos, que debemos respetar las instituciones de la ONU [aplausos], que debemos practicar la democracia, que debemos poner fin a los conflictos en África. Así que no hacíamos más que poner en práctica lo que se nos sermonea todos los días”. 

Baer explicó entonces que Estados Unidos había presentado un caso ante la CIJ contra Rusia y también fue desatendido. Esta vez, Pandor le interrumpió: "Nos corresponde a nosotros decir, cómo podemos encontrar una mejor manera... Los países más poderosos del mundo lo hacen más difícil, porque la impresión que se crea es que son los débiles quienes deben respetar, los débiles deben cumplir [enarcó las cejas como preguntando si Baer estaba de acuerdo], y los poderosos pueden hacer lo que les dé la gana". En su expresión se veía que Baer no estaba tan contento. 

Pandor siguió y preguntó: ¿"De qué manera contribuyen los poderosos al bien superior? ¿Qué papel se está desempeñando para garantizar que todos cumplamos con el estándar más alto?". Y se refirió entonces a la situación entre Ucrania y Rusia: "Somos el país que sigue hablando cada semana con ambos. Eso es decir que tenemos que meterlos en la misma habitación. Hemos participado en todos los grupos de trabajo, en el plan de paz del Presidente Zelenski. Y ahora hemos dicho, que consideramos que tiene que haber una reunión con Rusia". 

En cuanto a la observación de Baer de que el Occidente colectivo sería "respetuoso" reconociendo que los países emergentes del Sur Global tienen sus propias políticas y pueden expresar su desacuerdo con ellas. Pandor dijo estar totalmente de acuerdo con él, y dijo que "es importante que construyamos relaciones, entendiendo que habrá momentos en los que tengamos diferencias de puntos de vista y opiniones". Pero luego, refiriéndose al congresista de 200 que presentó un desagradable proyecto de ley atacando a Sudáfrica por presentar su demanda por genocidio contra Israel ante la CIJ, respondió: "Pero puedo asegurarle que, en Sudáfrica, si tenemos una diferencia de opinión con Estados Unidos de América, nunca iremos al parlamento y aprobaremos un proyecto de ley que diga que Sudáfrica [sic] tiene relaciones malignas. Nunca haremos algo así. Simplemente lo consideramos así”; y Baer se veía cada vez más derrotado e incómodo. Pandor continuó: "Estoy francamente horrorizada de que una democracia dé un paso así. Y lo que he dicho, no es contribuir a los gobiernos, es contribuir a construir el bien". Invocó el ejemplo y la influencia de su padre (uno de los primeros activistas contra el apartheid), y explicó: "Es algo idealista e ingenuo, como solía llamarme mi padre, porque soy un poco idealista. Pero sí creo que cuando tienes los medios de influencia, de recursos, si puedes, utilízalos para construir un bien mayor". 

Por otra parte, también se refirió a los intentos sudafricanos de conseguir que la República Centroafricana tenga elecciones libres y justas ayudando en la administración de las elecciones, no interfiriendo en ellas, sino prestando asistencia a la comisión electoral independiente del país. Por eso Sudáfrica se ofreció a acoger a Etiopía y al TPLF [Frente de Liberación Popular de Tigray], para que tengan conversaciones en nuestro entorno, para llegar a un acuerdo de paz". 

Enumeró otros esfuerzos que ha realizado Sudáfrica para lograr la paz en los conflictos africanos: "Así que tratamos de ser buenos. Pero no siempre acertamos... Creo que estamos haciendo un esfuerzo. Y para nosotros, el primer premio sería silenciar las armas en África, centrarnos en el desarrollo, la industrialización, la capacidad productiva, y lograr un medio de vida para la mayoría de los africanos, que nos sitúe en un espacio diferente de desarrollo. Ese es el primer premio y la primera preocupación para nosotros".

 

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