23 de marzo de 2024 (EIRNS) — Con el secretario de Estado de Estados Unidos, Tony Blinken a su lado, el ministro de Asuntos Exteriores de Egipto, Sameh Shoukry, anfitrión del encuentro, advirtió que la cooperación continuada del mundo árabe y musulmán con Estados Unidos y el mentado "orden basado en reglas" está en entredicho por la negativa de Estados Unidos a actuar para poner fin al asalto militar y humanitario contra los palestinos. 

La ocasión fue la conferencia de prensa conjunta que ofrecieron Blinken y Shoukry en El Cairo, Egipto, el 21 de marzo, tras su reunión más amplia con ministros y funcionarios de Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Jordania, Qatar y la Autoridad Palestina. Blinken habló como si todos los presentes fueran los mejores aliados y se hubiera alcanzado un sólido consenso. Luego la agencia británica de noticias Reuters preguntó a Shoukry si le molestaba la doble moral, como el hecho de que Estados Unidos retuviera $85 millones de dólares en ayuda militar a Egipto el año pasado por supuestas violaciones de los derechos humanos, y que Estados Unidos "no estuviera dispuesto a utilizar la misma presión sobre Israel". 

Sameh Shoukry restó importancia a la disputa sobre la ayuda militar estadounidense, pero abordó "la cuestión más amplia de la doble moral" con respecto a la causa palestina. 

"Nos preocupa que el orden mundial basado en reglas esté sometido a graves tensiones debido a la percepción y la aplicación de una doble moral en lo que respecta a la causa palestina en comparación con otros conflictos en el mundo, ya sea en términos humanitarios, en términos de derechos humanos, en términos de cese de hostilidades, que siempre ha sido el principio básico del orden internacional... Que en cualquier conflicto debe haber un cese inmediato y un alto a la actividad militar y que la resolución de un conflicto debe llevarse a cabo a través de canales diplomáticos". 

"Así que la base moral sobre la que podemos depender en un orden mundial se está resintiendo directamente debido a la sensación en muchos sectores, entre ellos nosotros mismos, muchos de nuestros colegas árabes y musulmanes, de que se está aplicando una doble moral. Y esto se debería considerar un serio desafío a nuestra capacidad de trabajar juntos, de seguir cooperando en torno a un conjunto predecible de principios que deberían regir todas nuestras acciones".