25 de marzo de 2024 (EIRNS) — Consideren la advertencia que hizo Helga Zepp-LaRouche, fundadora del Instituto Schiller, en la 42ª reunión consecutiva de la Coalición Internacional por la Paz (CIP), que se llevó a cabo el 22 de marzo: "Creo que el recrudecimiento de la situación estratégica va a calar en la gente de todo el mundo, porque si los rusos están diciendo realmente que ahora hay un estado de guerra, eso sí se va a escuchar. Sólo me queda esperar que una bola de idiotas que creen que todo esto es pura fanfarronada y que no va a ocurrir, por fin despierten". 

Hubo intensos bombardeos con misiles la noche del 23 de marzo, tanto de las fuerzas armadas rusas, como de las ucranianas armadas y guiadas por la OTAN, contra la infraestructura y ciudades de cada parte, mientras que las fuerzas terrestres rusas seguían avanzando. Esto siguió con gran intensidad a los comentarios del Presidente de Francia, Emmanuel Macron, y de otras figuras militares sobre el envío de fuerzas francesas a Ucrania contra los rusos; y eso, a su vez, a las conversaciones en Alemania sobre el envío de sus misiles de largo alcance para llevar a cabo ataques contra Rusia. El atentado terrorista del 22 de marzo en el teatro Crocus de Moscú, en el que murieron al menos 133 personas y unos 152 civiles resultaron heridos, puede llegar a convertirse en un detonante de una escalada mayor. 

El Kremlin y el Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB, por sus siglas en ruso) presentan pruebas de que al menos algunos de los terroristas fueron detenidos en Briansk, cerca de la frontera con Ucrania, a la que intentaban huir tras el horrible atentado de Moscú. Rusia está actuando basándose en esas pruebas. Los gobiernos de la OTAN, entre ellos el de Estados Unidos, principalmente a través de sus fieles medios “informativos”, rechazan airadamente las pruebas rusas e insisten en que se trató simplemente de un ataque del grupo terrorista yihadista "ISIS-K" o "ISIS-Khorasan” (o Jorasán) contra Rusia. 

Las dos cosas pueden ser ciertas, ya que ha habido vínculos entre terroristas chechenos, tayikos y otros terroristas antirrusos de lo que se denomina "ISIS", y ultraderechistas ucranianos, tanto en el pasado, como recientemente con la participación de la Dirección Principal de Inteligencia (GUR, por sus siglas en ucraniano) del ejército ucraniano. 

Consideren otro patrón. Los tres principales atentados terroristas reivindicados o atribuidos a "ISIS-K" en el 2024 han sido: un atentado el 3 de enero en Kerman, Irán, en el que murieron unos 95 iraníes al que Irán “respondió” con un ataque con misiles contra un supuesto emplazamiento de "ISIS-K" en Pakistán; el 21 de marzo, un atentado suicida en Kandahar, Afganistán, al parecer contra personal de seguridad del líder afgano del Talibán, Sheikh Haibatulá Ajundzadá; y el 23 de marzo, el atentado contra el teatro Crocus City Hall de Moscú. 

¿De quién son objetivo de ataque estas naciones? La respuesta es la OTAN y las élites financieras angloamericanas. ¿Y de dónde surgió el "ISIS"? En primer lugar surgió en las zonas devastadas por las intervenciones militares de los ejércitos de la OTAN. 

Luego está el actual gobierno de Israel. El presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Mike Johnson, invitó a Bibi Netanyahu a que hablase ante la Cámara, en persona o por otros medios, mientras el Primer ministro comete un genocidio en Gaza. La invitación fue anunciada por Johnson en una entrevista con la cadena CNBC el 21 de marzo. 

Ya en el 2002, Netanyahu habló ante las cámaras conjuntas del Congreso de Estados Unidos y, hablando a nombre de Dick Cheney, Paul Wolfowitz y los neoconservadores estadounidenses, Bibi Netanyahu dijo: "Si eliminan a [el Presidente de Iraq] Saddam, al régimen de Saddam, les garantizo que [eso] tendrá enormes y positivas reverberaciones en la región". Las reverberaciones fueron Al-Qaeda en el Levante (Iraq), y luego el "ISIS", junto con el ascenso al poder de Hamás; estimulados siempre por las decisiones de las cúpulas británica, estadounidense y de su aliado Israel. 

¿Qué están realmente la OTAN y sus aliados, tales como este gobierno de Israel, tratando de detener, o de destruir? 

Amin Nasser, funcionario petrolero de más alta jerarquía de Arabia Saudita, director ejecutivo de la compañía saudita Aramco, declaró recientemente que la "transición global a la energía verde" (del rey Carlos y de las élites del Foro Económico Mundial) son un fracaso, e hizo un llamado a abandonarlas a favor de las inversiones en combustibles fósiles, y la energía nuclear. 

Sin embargo, eliminar gradualmente los combustibles fósiles y la población humana es todo el plan del siglo 21 de Londres, Wall Street y las élites asociadas a la OTAN. Arabia Saudita se ha convertido en un adversario de esta “gran transición", junto con Rusia, Irán, China, Egipto, Brasil, etc., pero ¿no son esas naciones del BRICS? ¿Acaso el airado y militarmente poderoso aliado fascista de esas élites, el actual gobierno de Israel, se está desplegando para amenazar e intimidar a Arabia Saudita para que abandone esa causa, la del desarrollo económico internacional? 

Helga Zepp-LaRouche concluyó, en esa reunión de la Coalición Internacional por la Paz: "Esta es una situación en la que necesitamos que muchas fuerzas en todo el mundo digan: Si el actual orden mundial conduce a la guerra mundial, ¿con qué podemos sustituirlo para crear una paz duradera para toda la humanidad, de modo que salgamos de este peligro? Creo que una nueva arquitectura internacional de seguridad y desarrollo es la única forma de abordar estos problemas". 

Esta es la advertencia sobre la guerra que fue emitida en esa reunión: ¡Nuestro clamor de protesta no debe llegar demasiado tarde!