26 de marzo de 2024 (EIRNS) — Varios expertos en seguridad que fueron consultados por los medios informativos rusos señalan a Ucrania como principal sospechosa del lanzamiento y la coordinación del atentado terrorista del 22 de marzo en Moscú. 

Sergei Goncharov, veterano de la unidad de élite antiterrorista rusa Alpha, le dijo a Sputnik —la cadena rusa de noticias— que "por el momento no veo ningún factor que pueda alejarnos de la conexión ucraniana". Pudo haber sido alguna otra organización, pero no me cabe duda de que fue provocado por los nazis de Ucrania". En otra entrevista con Sputnik, el analista político y militar Serguéi Poletaev señaló que "el atentado en Moscú podría haber sido planeado por algún tipo de organización terrorista islamista vinculada a Ucrania, o incluso por Ucrania directamente". Poletaev sugirió que Occidente va a insistir en que el único responsable fue el ISIS. 

Seyed Mohammad Marandi, analista político y profesor de la Universidad de Teherán, le recordó a Sputnik que "tanto el ISIS como el régimen ucraniano tienen conexiones muy fuertes con Occidente... El ISIS ha cooperado con países de la OTAN, ha cooperado con Israel y ha cooperado con otros aliados de Estados Unidos en Siria durante años. Y Ucrania también depende enormemente de los países de la OTAN". 

El ex oficial de los Servicios Especiales, coronel (retirado) Bakhtiyer Rakhmonov explicó que: 

"El reclutamiento de los asesinos para llevar a cabo el atentado terrorista tuvo lugar a través de la embajada ucraniana en Dushanbe [Tayikistán]. Su embajador [Valerii Yevdokymov] fue jefe de la inteligencia exterior, y el propio consulado, varias semanas antes del atentado terrorista, estuvo buscando quien lo ejecutara, habiendo publicado abiertamente en la página de la embajada ucraniana en Tayikistán una orden para contratar asesinos".