10 de abril de 2024 (EIRNS) — El ministro de Seguridad Nacional de Israle, el ideólogo fanático sionista de "sangre y tierra", Itamar Ben-Gvir, amenazó al Primer ministro Benjamin Netanyahu con derribar el gobierno de Netanyahu si no intensifica el asalto militar a Rafah, donde se encuentran ascinados más de un millón de refugiados palestinos como último refugio. El lunes 8 publicó en sus redes sociales que, si Netanyahu "termina la guerra de Israel contra Hamás sin un ataque a gran escala contra Hamás en Rafah… dejará de tener mandato para servir como Primer ministro". 

El partido "Poder Judío" de Ben-Gvir, junto con el partido "Sionista Religioso" de su compinche, el otro orate fascista ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, tienen 14 escaños en el parlamento (Knesset), lo que sitúa a la coalición de Netanyahu en 64 de los 120 escaños, 3 por encima del mínimo necesario. Smotrich convocó una reunión de sus líderes sionistas religiosos, preocupado por los informes de que se estaba preparando "un acuerdo general para poner fin a la guerra sin derrotar a Hamás". Luego declaró en una carta a Netanyahu en la que le dice que no está "autorizado a tomar decisiones decisivas en tiempo de guerra" a nivel del "Gabinete de Guerra". Agrega que se están sometiendo a "presiones internacionales que perjudican el impulso de la guerra y nuestros intereses de seguridad". El gabinete de guerra, señala, no ha considerado la "advertencia durante muchas semanas" de Smotrich de que Israel debe pisar "el acelerador" militarmente. Ahora exige que Netanyahu convoque al gabinete en pleno, que incluye a Ben-Gvir y a él mismo. 

Por otra parte, el líder del partido de la oposición “Yesh-Atid”, Yair Lapid, volvió a ofrecer a su oponente Netanyahu una salida, su oferta de servirle a Netannyahu como "red de seguridad", con los 24 escaños de su partido en la Knesset para apoyar a Netanyahu, y mantenerlo como Primer Ministro, a pesar de todas sus diferencias, si eso le ayudaba a sortear el chantaje político de Ben-Gvir y Smotrich. A Netanyahu ya se le ha ofrecido este trato antes, pero lo ha ignorado, y ha mantenido su alianza con los dos fascistas fanáticos en su coalición. 

El mismo lunes 8 por la noche, en un breve mensaje de vídeo, Netanyahu rechazó la oferta de Lapid una vez más: "Esta victoria requiere entrar en Rafah y eliminar allí los batallones terroristas. Esto ocurrirá; hay una fecha". Aunque esto está ciertamente calculado para mantener su actual coalición, es probable que Netanyahu esté apostando a que estalle una guerra regional contra Irán, antes de que tenga que responder por sus crímenes en Gaza.