22 de mayo de 2024 (EIRNS) — El fiscal del Tribunal Penal Internacional, Karim Khan, cuando dio a conocer el 20 de mayo la solicitud de órdenes de detención contra tres dirigentes de Hamás y dos dirigentes israelíes, incluyó una advertencia explícita de que cualquiera que intente intimidar o amenazar al tribunal se enfrentará a un proceso judicial. El presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Michael McCaul (republicano de Texas), declaró el 20 de mayo al portal de noticias Axios que su comisión está redactando la legislación con la que ya antes habían amenazado con sancionar a Khan y a l TPI por solicitar órdenes de detención contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y el ministro de Defensa, Yoav Gallant. Y el senador Lindsey Graham (republicano de Carolina del Sur) publicó el mismo día en X, un comentario en el que promete trabajar "febrilmente" en el Senado y la Cámara para "imponer sanciones condenatorias contra el TPI". 

Khan citó el artículo 70 del Estatuto de Roma, titulado "Delitos contra la administración de justicia". En particular, especifica el delito de intencionadamente "Obstaculizar, intimidar o influir de manera corrupta en un funcionario del Tribunal con el fin de forzarlo o persuadirlo a no desempeñar sus funciones o a desempeñarlas indebidamente". 

Explica: "En caso de condena, el Tribunal podrá imponer una pena de prisión no superior a cinco años, o una multa de conformidad con las Reglas de Procedimiento y Prueba, o ambas". 

McCaul también le dijo a Axios que su proyecto de ley se basa en un proyecto de ley de 2023 del senador Tom Cotton, quien firmó en mayo junto con otros 11 senadores republicanos una carta en la que amenazan a Khan con que Estados Unidos está legalmente facultado para enviar la fuerza militar al TPI para rescatar al acusado nombrado en virtud de la “Ley de Invasión de La Haya” de 2022. La ley afirma la autoridad para utilizar "todos los medios necesarios y apropiados" para defender a cualquier estadounidense, o aliado, reclamado por el tribunal. 

El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson (republicano de Luisiana), marcó la pauta, calificando la medida del TPI de "vergonzosa" e "ilegal". Advirtió: "Si el gobierno de Biden no se opone, el TPI podría crear y asumir un poder sin precedentes para emitir órdenes de detención contra líderes políticos estadounidenses, diplomáticos estadounidenses y personal militar estadounidense". Exigió que la Casa Blanca "utilice todas las herramientas disponibles para impedir semejante abominación". 

El Presidente Joe Biden emitió el lunes 20 una declaración escrita: "La solicitud del fiscal del TPI de órdenes de detención contra dirigentes israelíes es escandalosa. Y permítanme ser claro: independientemente de lo que este fiscal pueda insinuar, no hay equivalencia, ninguna, entre Israel y Hamás. Siempre estaremos con Israel frente a las amenazas a su seguridad". 

Biden también condenó otras acusaciones, realizadas anteriormente, de la Corte Internacional de Justicia de la ONU y volvió a decantarse por decir las cosas claras: "Permítanme ser claro, contrariamente a las acusaciones contra Israel realizadas por la Corte Internacional de Justicia, lo que está ocurriendo no es un genocidio. Rechazamos eso... Estamos con Israel para acabar con Sinwar y el resto de carniceros de Hamás. Queremos a Hamás derrotado. Hemos trabajado con Israel para que así sea".