11 de julio de 2024 (EIRNS) — Frederick Kempe, presidente y director general del Atlantic Council (Consejo Atlántico) publicó un artículo en su sitio web titulado “Putin, Xi, Orbán, and Modi Provide a Disturbing Backdrop to the Start of the NATO Summit” (Putin, Xi, Orbán y Modi ofrecen un inquietante telón de fondo al inicio de la Cumbre de la OTAN) el día en que inició la cumbre de la OTAN. Kempe pinta un cuadro de la desesperada situación a la que se enfrentan los países de la OTAN en el inicio de su cumbre en Washington esta semana. Enumera los diversos sucesos que le preocupan, como los viajes del Primer ministro de Hungría Viktor Orbán a Moscú y Pekín (omitiendo que empezó en Kiev), la visita del Primer ministro de India Narendra Modi a Moscú ("ambos conocían la importancia del momento de sus visitas", escribe Kempe), y "el Presidente de Estados Unidos Joe Biden, que parecía perdido en su debate presidencial, suscitando más preocupaciones sobre lo que significa su salud para el futuro de la OTAN". 

Kempe critica a Estados Unidos y a Occidente por no ser más firmes en su defensa de Ucrania: "Estados Unidos aún no ha liberado del todo a los ucranianos para que utilicen los Sistemas de Misiles Tácticos del Ejército (ATACMS) de mayor alcance que podrían alcanzar los emplazamientos rusos desde los que se disparan misiles mortíferos. Es probable que los aliados de la OTAN vuelvan a aplazar la decisión sobre el momento exacto en que Ucrania se unirá a la Alianza, que es el único resultado que proporcionará al país la seguridad a largo plazo" de la que disfrutan sus vecinos, se queja. 

El tono de Kempe es sobre todo el de un gruñón, aunque desanimado, que se queja de que los "aliados" de la OTAN "no responden" ante los peligros, y algunos incluso "se desviven por respaldar a estos autócratas revisionistas". Esta comentario deja claro que los recientes acontecimientos han sacudido concretamente a muchos elementos de la casta política dominante en Occidente, de que las cosas no pintan bien para ellos.