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Lula da Silva discutirá con China la adhesión a la Iniciativa de la Franja y la Ruta

21 de julio de 2024 (EIRNS) — El Presidente de Brasil, Lula da Silva, anunció el viernes 19 que su gobierno presentará una propuesta a China para conversar sobre la adhesión a la Iniciativa de la Franja y la Ruta (IFR). Lula hizo estas declaraciones en un acto en el que el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) anunció la liberación de créditos por valor de 10.750 millones de reales para financiar proyectos de mejora de partes de la carretera federal de Dutra y de la que une Río de Janeiro con el puerto de Santos. La construcción de infraestructura es una de las principales prioridades de Lula, así como una de las señas de identidad de la IFR que ha invertido miles de millones, si no billones de dólares, en la construcción de infraestructuras en sus 151 países miembros. 

Actualmente, Brasil, Colombia y Paraguay son las únicas naciones sudamericanas que no se han unido a la IFR. China siempre ha querido incluir a Brasil en este enorme proyecto de desarrollo, pero ha dicho que respetaba las razones de Lula para no hacerlo. Ahora, con el surgimiento de la Mayoría Global, y el papel de liderazgo de Lula en ese proceso, así como el fin del paradigma unipolar y neocolonialista, unirse a la IFR es una opción coherente. 

Como informó el Diário Causa Operária, Lula comentó en el evento, "ya que China quiere discutir la Ruta de la Seda, vamos a tener que preparar una propuesta para discutir: ¿Qué gano yo? ¿Qué gana Brasil si participa en este negocio? ¿Cuáles son los factores importantes para la participación de Brasil?". 

En junio, cuando anunció que tendría una reunión bilateral con el Presidente de China, Xi Jinping, en la cumbre de jefes de Estado del G20 que se realizará los días 18 y 19 de noviembre en Río de Janeiro (Brasil ocupa actualmente la presidencia rotatoria del G20), Lula subrayó que buscaba una "asociación estratégica" con China. A principios de esta semana, el 16 de julio, planteó varios acontecimientos en los que Brasil desempeñará un papel destacado. Además del G20, mencionó la cumbre sobre cambio climático COP-30 en Azerbaiyán, la cumbre del BRICS del 22 al 24 de octubre en Kazán, Rusia, y la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en Perú, del 10 al 16 de noviembre. 

Brasil no es miembro de APEC, pero Lula informó el 18 de julio que "es la primera vez que Brasil ha sido invitado, y aunque no tengo mucho tiempo libre, ya he decidido que iré porque Brasil quiere entrar en este 'mundo chino'", según declaraciones recogidas por el diario hongkonés South China Morning Post. 

Xi Jinping, miembro de la APEC, también asistirá a la cumbre. Y durante su estancia en Perú, asistirá a la inauguración del fabuloso puerto de aguas profundas de Chancay, de $3.500 millones de dólares, a 70 km al norte de Lima, en la costa del Pacífico, construido por la naviera china COSCO. La construcción de Chancay, y lo que significará para la gran expansión del comercio y la conectividad de Sudamérica con China, ha sido una importante fuente de histeria y belicismo entre la casta política anglo-estadounidense dominante.

 

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