1º de agosto de 2024 (EIRNS) — El ataque de ayer contra Ismail Haniyeh, jefe de la oficina política de Hamás, se produjo literalmente horas después de que Israel atacara a última hora del 30 de julio al comandante militar de Hezbolá, Fuad Shukr en Beirut, Líbano. Hezbolá confirmó finalmente la muerte de Shukr a última hora del día, después de que su cuerpo fuera recuperado de entre los escombros resultantes del ataque israelí. Hezbolá informó en un comunicado que su respuesta al asesinato de Shukr sería anunciada en un discurso de su líder, Hassan Nasrallah, hoy 1º de agosto, informó Al Mayadeen, el canal árabe de noticias on sede en Beirut. 

Antes del ataque a Beirut, Estados Unidos había advertido a Hezbolá a través de mediadores libaneses que Israel planea llevar a cabo "grandes ataques" en el este y el sur de Líbano en represalia por un ataque en los Altos del Golán ocupados por Israel, pero que no pasaría a ser una ofensiva mayor, informó Middle East Eye (MEE), el sitio de noticias sobre Oriente Medio con sede en Londres. Según MEE esas promesas hechas a escondidas podrían explicar por qué funcionarios estadounidenses se han encogido de hombros públicamente ante las preocupaciones de que estalle una guerra entre el grupo respaldado por Irán e Israel, y las han calificado de "exageradas". 

Tras el asesinato de Haniyeh, las garantías de Estados Unidos de que se descarta una guerra general entre Israel, Hezbolá e Irán, no valen nada.