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La realidad no puede negarse
Israel aplica el método que Hitler usó contra el gueto judío de Varsovia
por Paul Gallagher
Las reiteradas advertencias públicas hechas por el precandidato presidencial estadounidense Lyndon LaRouche contra el "fascismo demencial de Ariel Sharon", fueron pasmosamente confirmadas por el informe de un militar de Israel que publicó el diario israelí Ha'aretz, el 25 de enero. Según Ha'aretz, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han venido estudiando las tácticas que las tropas de la SS nazi emplearon en 1943 contra la resistencia judía en el gueto de Varsovia, y actualmente las aplican contra los palestinos en la Ribera Occidental y en la Franja de Gaza.
LaRouche respondió al informe recalcando que hay que encarar a los gobiernos europeos y, especialmente, al gobierno de George Bush, con la intención manifiesta de las FDI y del primer ministro Ariel Sharon, de adoptar específicamente los métodos de los nazis en contra de una población que ofrece resistencia, y exigirles que asuman responsabilidad. La Casa Blanca le ha venido dando luz verde a la campaña de Sharon de asesinar y eliminar a la dirigencia palestina. LaRouche usará todo el peso de su autoridad —misma que ha ganado por sus advertencias precisas desde que Sharon emprendió su lucha por el poder en septiembre de 2000— para hacer que los EU y los gobiernos europeos respondan por las consecuencias. "Los Estados Unidos tienen la influencia para parar esto", dijo LaRouche.
La realidad no puede negarse
La pasmosa confesión del oficial anónimo de las FDI, apareció en un artículo del veterano reportero de Ha'aretz, Amir Oren, sobre las acciones de Sharon para eliminar a Yasser Arafat y a la Autoridad Palestina. El artículo también fue publicado en la edición en inglés de Ha'aretz, el 27 de enero. Ese mismo día, Ari Fleischer, portavoz de la Casa Blanca rehusó vehementemente responder a las preguntas que le hiciera al respecto el corresponsal de EIR, diciendo que "yo no respondo a informes anónimos". Pero Raánan Gissen, el portavoz del mismo Sharon, habló sin vergüenza cuando EIR lo entrevistó el 30 de enero. Al preguntársele si los oficiales de las FDI estudiaban la estrategia que emplearon los nazis en el gueto de Varsovia, Gissen respondió: "Pueda que algunos oficiales hayan estado estudiando eso. Pensaron que era parecido, porque uno estaría peleando de calle en calle contra la Autoridad Palestina". El portavoz de Sharon añadió que, "el problema real son aquellos que rehusan prestar servicio", una referencia al movimiento de militares de la reserva de Israel que han dicho que no van a prestarse para oprimir a los palestinos. "Podrán ser procesados por un consejo de guerra", dijo. "Tendrán que atenerse a las consecuencias, si no prestan servicio cuando se les haga el llamamiento. Ese es el verdadero problema", insistió.
La Unión Europea sí emitió una declaración el 28 de enero, en la que le exigió al "gobierno israelí retirar sus fuerzas militares y cesar sus ejecuciones extrajudiciales, levantar todas las prohibiciones y restricciones impuestas al pueblo palestino y a sus dirigentes, y suspender la construcción de asentamientos" en los territorios ocupados. También condenó a Israel por la "destrucción de la infraestructura palestina, y de otras instalaciones que ayudan a los palestinos en su desarrollo económico, social y humanitario". Tal destrucción era un razgo típico de la campaña de exterminio que realizaron las SS nazis contra el gueto de Varsovia y otras poblaciones.
Los EU deben emprender acciones decisivas como las que tomó el presidente Dwight Eisenhower en 1956, con la que obligó a Israel a retroceder de su invasión a Egipto. Esa presión decisiva deberá ser respaldada con financiamiento serio para una estrategia de desarrollo para que haya paz en la región.
La resistencia judía en Israel
Dentro del propio Israel, aun antes del 25 de enero, comenzaba a tomar cuerpo un movimiento de resistencia en el pueblo contra "los nuevos fascistas" del gobierno. Ello, no obstante el éxito que tuvo el gobierno de Sharon el año anterior en fomentar la histeria del pueblo israelí contra la dirigencia palestina y los Acuerdos de Oslo. Hasta el 30 de enero, unos 100 reservistas israelíes habían firmado una declaración pública diciendo: "No volveremos a pelear más allá de la Línea Verde con el propósito de ocupar, deportar, devastar, bloquear, matar, hambrear, y humillar a todo un pueblo". Los reservistas quieren reunir el apoyo de 500 reservistas para la declaración, y emprender una campaña social más amplia.
Roman Bronfman, miembro del Knesset (parlamento), formó un nuevo partido, Opción Democrática, para tratar de "evitar que Israel deteriore a un estado de fascismo ordinario", según le dijo a Ha'aretz del 28 de enero. Bronfman quiere presionar a dirigentes del Partido Laborista tales como el presidente del Knesset, Avraham Burg, a Yossi Beilin, y a la viceministra de Defensa, Dalia Rabín Pelossof, para que salgan de la coalición de unidad nacional de Sharon. Los tres han hecho advertencias fuertes sobre las consecuencias de las políticas de Sharon.[FIGURE 31]
El conocido periodista israelí, Gideon Levy, emitió una carta abierta al ministro de Relaciones Exteriores, Shimon Peres, dirigente laborista, exigiéndole que renuncie para que caiga el gobierno. Según informes, en enero Peres les advirtió a sus colegas en el gabinete que Israel está cometiendo actos por los cuales ellos podrían ser enjuiciados como criminales de guerra. "Un gobierno —dice la carta de Levy— que deliberadamente sabotea todo los esfuerzos palestinos por alcanzar la tranquilidad, que humilla totalmente a sus dirigentes, para el cual la venganza es el único motivo que lo mueve. . . no puede seguir siendo perdonado".
Desde junio de 2001, LaRouche ha venido recordándoles a los israelíes de forma reiterada, que no pueden ganar una guerra peleando con principios fascistas, en medio de un derrumbe económico mundial que también está hundiendo a la economía israelí. El tipo de guerra religiosa en continua expansión que resulta de semejantes crímenes de guerra, con el tiempo llevará a la destrucción del propio Israel, advierte LaRouche.
Han muerto más civiles y soldados israelíes desde que Sharon asumió el poder en enero de 2001, que en todos los seis años previos a los Acuerdos de Oslo que él repudia. Casi a diario mueren civiles por los carros bomba y los ataques suicidas. El mismo Sharon enfrenta un juicio en Bélgica, donde será encausado por crímenes de guerra cometidos cuando era ministro de Defensa en 1982, en conexión con la masacre de palestinos en los campos de refugiados de Sabra y Chatila, durante la guerra civil en el Líbano.
El modelo del gueto de Varsovia
El hecho horrible de que las FDI estudien los métodos empleados por los nazi para aniquilar a los antepasados de los israelíes en Varsovia, palidece cuando uno ve la fuente que deben de haber consultado: Jürgen Stroop, el general de policía nazí que comandó la aniquilación, y quien llevó un registro, casi hora por hora, de sus tácticas y acciones durante esos 28 días terribles de abril y mayo de 1943.
En su Informe Stroop: "El gueto de Varsovia ya no existe", el sicópata general nazi describe como sus tropas liquidaron o deportaron a los más de 60.000 judíos que todavía quedaban en Varsovia, quienes libraban una creciente guerra de resistencia; ya se había deportado a 300.000 judíos de Varsovia a los campos de concentración. Muchos de los 60.000 restantes eran empleados o administradores de las fábricas de armas del gueto que suplían al ejercito alemán. Así que pudieron armarse, razón por la que el ejercito regular alemán resistió obedecer las ordenes de Berlín de deportarlos.
Heinrich Himmler mandó a Stroop a resolver el "problema" con fuerzas de la SS y la policía. En sus declaraciones y ordenes, Stroop llamaba a los judíos "bandidos enemigos armados y terroristas", y decía que sus tropas libraban una lucha heroíca y peligrosa contra ese enemigo armado.
Stroop fue cercando y aislando al gueto progresivamente, y luego procedió a destruir el área residencial, cuadra por cuadra. Las tropas nazis quemaron y volaron edificios de departamentos y tiendas; al tiempo que los judíos eran forzados a dejarlos, los combatientes de la resistencia eran liquidados, y el resto enviado inmediatamente a los campos. La sola resistencia de un edificio era suficiente para destruir y quemar la cuadra entera; a los sótanos se les bombeaba gas venenoso. La infraestructura eléctrica y de otro tipo fue destruida de manera sistemática por las fuerzas de Stroop; las alcantarillas donde se escondían los judíos fueron inundadas o llenadas con gas. Stroop guardó para último dinamitar ceremonialmente la principal sinagoga de Varsovia, el 16 de mayo de 1943, su símbolo de que todos los judíos restantes habían sido matados o "removidos".
Los mismos métodos fueron usados nuevamente en 1944, contra la resistencia polaca no judía en Varsovia.
Crímenes de guerra
Todo esto trae a mente la declaración de marras de los 100 reservistas israelíes, de qué es en lo que se rehúsan a participar. Aclara el porqué de la estrategia de cercar el área palestina y expulsar a todos los palestinos de las áreas israelíes, planteada por el partidario de Sharon, Samuel Bronfman, y que ahora estudian funcionarios de seguridad del gobierno de Sharon.
Si es la "guerra" del gueto de Varsovia lo que estudian las FDI, entonces el Informe Stroop es la fuente. El loco general nazi hizo encuadernar su informe en piel, y le presentó una copia ilustrada formalmente a Himmler como regalo. Posteriormente fue "presentado", en un sentido diferente, al fiscal del tribunal de Nurembergo, Robert Jackson, quien lo hizo público. En 1946, este informe que, ahora aparentemente es un manual táctico de las Fuerzas de Defensa de Israel, fue presentado en Nuremburgo como elemento probatorio prueba de los peores crímenes de guerra.
Stroop fue capturado en 1945 por el Ejercito Rojo soviético. Durante su breve detención, su personalidad experimentó una marcada desintegración; fue juzgado, condenado, y ejecutado.
El Informe Stroop fue editado en 1998 —como una advertencia a las naciones de hoy—, por el Proyecto de la Historia del Holocausto, que también lo tradujo al inglés, versión disponible en su totalidad en su sitio de internet desde 1999. Como advierte LaRouche, esto ya es un asunto decisivo de moralidad nacional, y de la guerra y la paz.