Como muestra el mapa 2, los seis principales estados de emigración, en números absolutos, en el período comprendido entre 1995 y 2000, fueron Jalisco, Michoacán, Guanajuato, México, Veracruz y Guerrero. Juntos, respondían por la mitad de todos los mexicanos que emigraron en ese período. No es sorpresa que éstos estén entre los estados más pobres de México. Por ejemplo, en la década más reciente el crecimiento económico de estos seis estados —medido por las estadísticas oficiales del “volumen físico” del total de la actividad económica—, fue mucho menor que el promedio nacional, con la excepción de Guanajuato. De manera similar, el porcentaje de la población total con acceso a la atención médica fue menos que el promedio nacional en cinco de esos seis estados, siendo Jalisco la excepción en este caso.