Internacional
LYM: El neoliberalismo es prehistoria, ¡abran
paso a la ‘nueva economía’!
por Betiana González, miembro del LYM
Éste es el método de pronóstico
físico–económico de largo plazo necesario para hacer
presupuestos de capital competentes, y el mismo que Kepler empleó para
descubrir la gravedad, y también otras cuestiones de principio
físico universal. Éste es, así, el método
específicamente dinámico de todo trabajo científico y de
todo pronóstico competente en la historia.
—Lyndon H. LaRouche, “La danza de los
ibiotas”.
Si quieren saber cómo deshacerse de
los hombres–bestia hobbesianos que aún pululan por las aulas de las
universidades, vaciando las mentes de los estudiantes que se preparan para ser
los futuros políticos y economistas en lugares como Harvard, entonces
fíjense cómo el Movimiento de Juventudes Larouchistas (LYM)
encabeza esta batalla con su método de organización
política específicamente dinámico; ésa es la
“nueva política”.
El 20 de enero la Facultad de Administración de Empresas de la
Universidad de Harvard auspició una conferencia para estudiantes
latinoamericanos. Como oradores invitados estuvieron dos ex presidentes,
Alejandro Toledo de Perú y César Gaviria de Colombia,
además de varios ex ministros de Economía, entre otros
especímenes friedmanitas que, como genuinos representantes de “la
vieja política”, se congregaron para repetir sus consabidas recetas
de saqueo neoliberal estilo FMI. Para sorpresa de estudiantes y periodistas, el
LYM estuvo presente, lo que desató la polémica entre los 700
asistentes.
El caso de México
La primera ponencia la dieron Daniel Servitje, gerente ejecutivo del Grupo
BIMBO, y Ralph Álvarez, presidente de la empresa internacional McDonalds.
Como era de esperarse, se planteó el “exitoso y fructífero
camino empresarial” de las políticas económicas
neoconservadoras de crecimiento sostenido de las últimas décadas
en Latinoamérica, tales como la “deslocalización”. El
ejemplo más claro de esta mentira son las maquiladoras en México y
lo que actualmente se aplica en compañías como General Motors y
Ford en Estados Unidos, que desmantelan sus plantas para trasladarlas a
países subdesarrollados con el solo objetivo de la rentabilidad
económica privada. Cuando comenzó el diálogo entre los
oradores, Servitje hizo alusión a las elecciones en México, al
decir que podemos estar alegres con FeCal (Felipe Calderón) como
presidente, pues seguirá aplicando las políticas de libre
mercado.
Era una afirmación muy provocadora como para desaprovecharla, por lo
que en el período de preguntas una servidora —quien es una
integrante del LYM en Argentina que está de visita en EU—
cuestionó a Servitje: “¿Cómo cree usted que
debería reorientarse la concepción económica actual,
teniendo en cuenta el impacto social y cultural de las políticas de
deslocalización empleadas en Latinoamérica en los últimos
años y, por ejemplo, el hecho de que Calderón no es el Presidente
legítimo de México, ya que es [Andrés Manuel] López
Obrador quien representa al 80% de la población de ingresos mas
bajos?” En ese momento, todos voltearon para ver quién hacía
la pregunta, y luego de un silencio de perplejidad, el moderador dijo:
“Creo que no se escuchó la pregunta, hay un silbido en el
micrófono. ¿Podrías repetirla?” Esto dio oportunidad de
elaborarla mejor, con lo que el desconcierto fue tal, que el profesor de Harvard
que fungía como moderador sólo atinó a decirle a Servitje:
“¡Buena suerte!” Como pudo, en un intento por salvar su puesto
de “doblacucharas maltusiano”, éste contestó que las
políticas de deslocalización son algo que quizás
debería reformarse, y en cuanto a las elecciones en México:
“¡Lo único que tengo para decir, es que no ha habido
más avances en la movilización de Obrador y que, desde las
elecciones, ha ido perdiendo su popularidad de manera
creciente”.
Lo curioso es que luego de la conferencia una mujer mexicana del
público se acercó a la joven larouchista para felicitarla por la
pregunta, diciendo: “Nadie más está diciendo la verdad de lo
que pasa en México; tienen miedo o están controlados.
¡Lograste ponerlos nerviosos! Cuando hiciste la pregunta yo estaba parada
cerca de los funcionarios y ministros del Gobierno mexicano, y ellos se
preguntaban, ‘¿Pero quién es esa muchacha? ¿Por
qué está diciendo eso? ¡Hay que pararla! No queremos que la
gente hable de Obrador aquí’ ”.
También una joven estudiante de Harvard se acercó a
preguntarle a los larouchistas: “¿Por qué piensan que
López Obrador es el Presidente legítimo de México?
¡Eso no es cierto!” Luego de explicarle lo del fraude electoral, ella
afirmó que la solución era la redistribución de la riqueza
(!). Entonces le explicamos que la economía no se trata de dinero, sino
que es una medida física del proceso creativo del ser humano, y le presentamos a LaRouche, lo que despertó en ella una gran
interrogante: “Pero, ¡qué es la economía
física?”
|
Ver ampliación
Los organizadores del LYM usan su “arma secreta”, el canto,
para transformar la situación política. La manta reza:
“¡Lee entre votos! Enjuiciemos a Cheney, pero ya”. (Foto: Will
Mederski/EIRNS). |
|
Ver ampliación |
¡Qué ibiotas!
Pero Servitje no fue el único que se quedó sin palabras. Como
la segunda presentación planteaba el asunto de los biocombustibles, otra
joven del LYM preguntó: “Señor Álvarez, ¿le
preocupa el rápido aumento del precio del maíz y la
producción como resultado del impulso actual para producir
biocombustibles con nuestra comida? ¿Qué va a suceder con McDonalds
si los productores deciden que económicamente les conviene más
hacer dinero con la especulación que con la producción de
comida?” Álvarez empezó a temblar y a retorcerse:
“Creo firmemente que los mercados se van a calmar. Va a haber un impacto,
pero de seguro no va a ser un impacto mayor. Es decir, realmente creo que los
mercados se van a calmar”.
La siguiente presentación fue sobre la inversión extranjera
en Latinoamérica, donde el principal expositor fue Guillermo
“Drácula” Mondino, ex secretario de Política
Económica de Argentina y ex asesor de Ecuador durante su
dolarización. Su presentación dejó entrever ciertos rasgos
bestiales, que sólo encuentran paralelo en el personaje Iago de la obra
de Shakespeare, Otelo, a través de una máscara de furia y
disgusto que cubrió su rostro todo el tiempo. Desde el comienzo
presentó un panorama de amenazantes vertientes izquierdistas en
Latinoamérica, como el caso del nuevo Presidente de Ecuador, Rafael
Correa, junto con Hugo Chávez de Venezuela y Evo Morales de Bolivia, pero
como un problema menor para los boyantes mercados financieros asiáticos y
la estabilidad del mercado europeo.
¿Quién dijo ‘Club de
Presidentes’?
A pesar de que las preguntas del público apuntaban a un
fenómeno político real que LaRouche ha denominado el “Club
de Presidentes” de Sudamérica, mismo que encabeza el mandatario
argentino Néstor Kirchner, Mondino se esforzó por demostrar su
total convencimiento de que no existe tal “amenaza”. Fue el momento
preciso para hacerlo estallar de furia. De nuevo, quien esto escribe intervino;
al entregarle el documento de LaRouche, “El arte perdido de hacer
presupuestos de capital”, el rostro de Mondino se puso frígido, y
más al plantearle que el proceso por el cual este informal Club de
Presidentes encabeza la batalla contra las políticas nefastas del FMI
está virando la situación hacia un cambio paradigmático en
Sudamérica, en dirección a la “nueva economía”,
como respuesta al desplome del libre comercio.
Mondino interrumpió completamente histérico:
“¿Qué desplome? ¿Dónde, en Argentina? Sí,
uno puede ver que el vaso está por rebosarse, ¡pero la realidad es
que no hay ningún colapso en Japón! ¡No hay posibilidad de
que el dólar estadounidense sufra un colapso mañana’!
¡No hay posibilidad de que Latinoamérica sufra un gran desequilibrio
en el corto plazo! ¡No hay crisis en el sistema bancario!”
Para seguir alimentando su paranoia, otra joven del LYM lo abordó
durante el almuerzo: “¡Señor Mondino! ¿Conoce a
Félix Rohatyn?” “¡Oh, sí!”, fue su
respuesta. “Me preguntaba qué piensa de las recientes elecciones en
EU”. Mondino explotó: “He aprendido a no opinar mucho de los
resultados de las elecciones; ¡es pura palabrería!” La joven
replicó: “Esto no es sólo palabrería, es muy serio.
Incluso están siendo organizados para reconstruir el sistema financiero
entero”. Mondino: “Bueno, no creo que sería una mala idea
juntar a los jefes de Estado para que resuelvan algunas cosas”. La joven
le dijo: “La comida que te serviste, ¿está hecha de dinero?
Una economía es una sistema físico”. Mondino la miró
confundido: “¿Quién te enseñó eso?”
“¡LaRouche!”, fue la respuesta. “¡Bueno, te deseo
suerte. . . En realidad no te deseo nada, ¡parece que me quieres
dejar sin trabajo!” |
|