Economía

Resumen electrónico de EIR, Vol.XXIV, núm. 2

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Internacional

 

LYM: El neoliberalismo es prehistoria, ¡abran paso a la ‘nueva economía’!

por Betiana González, miembro del LYM

Éste es el método de pronóstico físico–económico de largo plazo necesario para hacer presupuestos de capital competentes, y el mismo que Kepler empleó para descubrir la gravedad, y también otras cuestiones de principio físico universal. Éste es, así, el método específicamente dinámico de todo trabajo científico y de todo pronóstico competente en la historia.
—Lyndon H. LaRouche, “La danza de los ibiotas”.

Si quieren saber cómo deshacerse de los hombres–bestia hobbesianos que aún pululan por las aulas de las universidades, vaciando las mentes de los estudiantes que se preparan para ser los futuros políticos y economistas en lugares como Harvard, entonces fíjense cómo el Movimiento de Juventudes Larouchistas (LYM) encabeza esta batalla con su método de organización política específicamente dinámico; ésa es la “nueva política”.

El 20 de enero la Facultad de Administración de Empresas de la Universidad de Harvard auspició una conferencia para estudiantes latinoamericanos. Como oradores invitados estuvieron dos ex presidentes, Alejandro Toledo de Perú y César Gaviria de Colombia, además de varios ex ministros de Economía, entre otros especímenes friedmanitas que, como genuinos representantes de “la vieja política”, se congregaron para repetir sus consabidas recetas de saqueo neoliberal estilo FMI. Para sorpresa de estudiantes y periodistas, el LYM estuvo presente, lo que desató la polémica entre los 700 asistentes.

El caso de México

La primera ponencia la dieron Daniel Servitje, gerente ejecutivo del Grupo BIMBO, y Ralph Álvarez, presidente de la empresa internacional McDonalds. Como era de esperarse, se planteó el “exitoso y fructífero camino empresarial” de las políticas económicas neoconservadoras de crecimiento sostenido de las últimas décadas en Latinoamérica, tales como la “deslocalización”. El ejemplo más claro de esta mentira son las maquiladoras en México y lo que actualmente se aplica en compañías como General Motors y Ford en Estados Unidos, que desmantelan sus plantas para trasladarlas a países subdesarrollados con el solo objetivo de la rentabilidad económica privada. Cuando comenzó el diálogo entre los oradores, Servitje hizo alusión a las elecciones en México, al decir que podemos estar alegres con FeCal (Felipe Calderón) como presidente, pues seguirá aplicando las políticas de libre mercado.

Era una afirmación muy provocadora como para desaprovecharla, por lo que en el período de preguntas una servidora —quien es una integrante del LYM en Argentina que está de visita en EU— cuestionó a Servitje: “¿Cómo cree usted que debería reorientarse la concepción económica actual, teniendo en cuenta el impacto social y cultural de las políticas de deslocalización empleadas en Latinoamérica en los últimos años y, por ejemplo, el hecho de que Calderón no es el Presidente legítimo de México, ya que es [Andrés Manuel] López Obrador quien representa al 80% de la población de ingresos mas bajos?” En ese momento, todos voltearon para ver quién hacía la pregunta, y luego de un silencio de perplejidad, el moderador dijo: “Creo que no se escuchó la pregunta, hay un silbido en el micrófono. ¿Podrías repetirla?” Esto dio oportunidad de elaborarla mejor, con lo que el desconcierto fue tal, que el profesor de Harvard que fungía como moderador sólo atinó a decirle a Servitje: “¡Buena suerte!” Como pudo, en un intento por salvar su puesto de “doblacucharas maltusiano”, éste contestó que las políticas de deslocalización son algo que quizás debería reformarse, y en cuanto a las elecciones en México: “¡Lo único que tengo para decir, es que no ha habido más avances en la movilización de Obrador y que, desde las elecciones, ha ido perdiendo su popularidad de manera creciente”.

Lo curioso es que luego de la conferencia una mujer mexicana del público se acercó a la joven larouchista para felicitarla por la pregunta, diciendo: “Nadie más está diciendo la verdad de lo que pasa en México; tienen miedo o están controlados. ¡Lograste ponerlos nerviosos! Cuando hiciste la pregunta yo estaba parada cerca de los funcionarios y ministros del Gobierno mexicano, y ellos se preguntaban, ‘¿Pero quién es esa muchacha? ¿Por qué está diciendo eso? ¡Hay que pararla! No queremos que la gente hable de Obrador aquí’ ”.

También una joven estudiante de Harvard se acercó a preguntarle a los larouchistas: “¿Por qué piensan que López Obrador es el Presidente legítimo de México? ¡Eso no es cierto!” Luego de explicarle lo del fraude electoral, ella afirmó que la solución era la redistribución de la riqueza (!). Entonces le explicamos que la economía no se trata de dinero, sino que es una medida física del proceso creativo del ser humano, y le presentamos a LaRouche, lo que despertó en ella una gran interrogante: “Pero, ¡qué es la economía física?”

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Los organizadores del LYM usan su “arma secreta”, el canto, para transformar la situación política. La manta reza: “¡Lee entre votos! Enjuiciemos a Cheney, pero ya”. (Foto: Will Mederski/EIRNS).

impeachment chorus black and white

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¡Qué ibiotas!

Pero Servitje no fue el único que se quedó sin palabras. Como la segunda presentación planteaba el asunto de los biocombustibles, otra joven del LYM preguntó: “Señor Álvarez, ¿le preocupa el rápido aumento del precio del maíz y la producción como resultado del impulso actual para producir biocombustibles con nuestra comida? ¿Qué va a suceder con McDonalds si los productores deciden que económicamente les conviene más hacer dinero con la especulación que con la producción de comida?” Álvarez empezó a temblar y a retorcerse: “Creo firmemente que los mercados se van a calmar. Va a haber un impacto, pero de seguro no va a ser un impacto mayor. Es decir, realmente creo que los mercados se van a calmar”.

La siguiente presentación fue sobre la inversión extranjera en Latinoamérica, donde el principal expositor fue Guillermo “Drácula” Mondino, ex secretario de Política Económica de Argentina y ex asesor de Ecuador durante su dolarización. Su presentación dejó entrever ciertos rasgos bestiales, que sólo encuentran paralelo en el personaje Iago de la obra de Shakespeare, Otelo, a través de una máscara de furia y disgusto que cubrió su rostro todo el tiempo. Desde el comienzo presentó un panorama de amenazantes vertientes izquierdistas en Latinoamérica, como el caso del nuevo Presidente de Ecuador, Rafael Correa, junto con Hugo Chávez de Venezuela y Evo Morales de Bolivia, pero como un problema menor para los boyantes mercados financieros asiáticos y la estabilidad del mercado europeo.

¿Quién dijo ‘Club de Presidentes’?

A pesar de que las preguntas del público apuntaban a un fenómeno político real que LaRouche ha denominado el “Club de Presidentes” de Sudamérica, mismo que encabeza el mandatario argentino Néstor Kirchner, Mondino se esforzó por demostrar su total convencimiento de que no existe tal “amenaza”. Fue el momento preciso para hacerlo estallar de furia. De nuevo, quien esto escribe intervino; al entregarle el documento de LaRouche, “El arte perdido de hacer presupuestos de capital”, el rostro de Mondino se puso frígido, y más al plantearle que el proceso por el cual este informal Club de Presidentes encabeza la batalla contra las políticas nefastas del FMI está virando la situación hacia un cambio paradigmático en Sudamérica, en dirección a la “nueva economía”, como respuesta al desplome del libre comercio.

Mondino interrumpió completamente histérico: “¿Qué desplome? ¿Dónde, en Argentina? Sí, uno puede ver que el vaso está por rebosarse, ¡pero la realidad es que no hay ningún colapso en Japón! ¡No hay posibilidad de que el dólar estadounidense sufra un colapso mañana’! ¡No hay posibilidad de que Latinoamérica sufra un gran desequilibrio en el corto plazo! ¡No hay crisis en el sistema bancario!”

Para seguir alimentando su paranoia, otra joven del LYM lo abordó durante el almuerzo: “¡Señor Mondino! ¿Conoce a Félix Rohatyn?” “¡Oh, sí!”, fue su respuesta. “Me preguntaba qué piensa de las recientes elecciones en EU”. Mondino explotó: “He aprendido a no opinar mucho de los resultados de las elecciones; ¡es pura palabrería!” La joven replicó: “Esto no es sólo palabrería, es muy serio. Incluso están siendo organizados para reconstruir el sistema financiero entero”. Mondino: “Bueno, no creo que sería una mala idea juntar a los jefes de Estado para que resuelvan algunas cosas”. La joven le dijo: “La comida que te serviste, ¿está hecha de dinero? Una economía es una sistema físico”. Mondino la miró confundido: “¿Quién te enseñó eso?” “¡LaRouche!”, fue la respuesta. “¡Bueno, te deseo suerte. . . En realidad no te deseo nada, ¡parece que me quieres dejar sin trabajo!”