LaRouche lleva su campaña al estado de
Nueva Hamsphire

Concord (EIRNS)—A la una de la tarde del 12 de noviembre se colmó el salón de lectura política de la Biblioteca Estatal de Nueva Hampshire, en la ciudad capital de Concord, para escuchar al precandidato por el Partido Demócrata a la Presidencia de los Estados Unidos para el 2004, Lyndon H. LaRouche, en uno de múltiples actos de campaña en su estado natal.

Barbara Richardson, diputada demócrata de la legislatura estatal, presentó a LaRouche como oriundo de Rochester, quien figura ya en la boleta electoral para las próximas elecciones primarias. Richardson lo describió como uno de los principales candidatos del Partido Demócrata, a juzgar por el apoyo económico que ha recibido su campaña en muchos estados, incluso Nueva Hamsphire. Richardson hizo un recuento de los principales temas de la campaña de LaRouche, destacando su llamado a la celebración de una nueva conferencia de Bretton Woods. LaRouche mismo asistió a la primera conferencia en dicha localidad neohampshireña en 1946, siendo un joven estudiante de periodismo.

El primero de los tres temas abordados por LaRouche en su declaración inicial de cerca de media hora fue el de la necesidad de tomar medidas para detener la propagación de la guerra que el vicepresidente de los Estados Unidos, Dick Cheney, amenaza con intensificar hasta su desenlace en un conflicto nuclear mundial, así como la guerra asimétrica ampliada que se ha desatado ahora en Iraq. El segundo tema fue el de la economía, a la que LaRouche calificó de estar en una fase de desintegración final, cuya solución es la reorganización por bancarrota de todo el sistema financiero mundial, y la construcción de una gigantesca serie de obras de infraestructura en esferas tales como la producción y generación de energía, la gestión de aguas, el transporte y los servicios de salud.

El tercer tema que abordó LaRouche fue el de la actual "brecha generacional", que resume el problema de la "generación del 68", cuyo surgimiento explicó con el cambio de paradigma ocasionado por el bombardeo atómico de Hiroshima y Nagasaki, la crisis de los proyectiles nucleares de Cuba, y la degeneración de la política económica a partir de los años sesenta. LaRouche presentó la perspectiva de su Movimiento de Juventudes Larouchistas como solución única a esta crisis.

Luego, por espacio de media hora, el candidato respondió a las preguntas de los principales medios de difusión de Nueva Hampshire, ahí presentes. LaRouche refutó con facilidad el cuento chino de que su fraudulenta condena judicial —políticamente motivada— de alguna manera le excluye de la Presidencia; dijo que esa condena era para él una "distinción de honor" como la que llevaron los próceres de la Independencia de los Estados Unidos, todos los cuales fueron tachados de criminales por la Corona británica. Luego pasó a una discusión sustanciosa sobre Howard Dean, George Soros, África, y el peligro en que se encuentra actualmente el sistema de gobierno representativo estadounidense.

Al concluir la rueda de prensa LaRouche fue entrevistado por una estación de televisión de Manchester, Nueva Hamsphire, que transmitió la declaración del candidato al efecto de que "yo tengo el valor de hablar de los temas de la economía y la guerra, que ninguno de esos muchachos [los otros nueve precandidatos demócratas] se han atrevido a nombrar".

El sitio electrónico de la campaña del candidato, www.larouchein2004.com, reprodujo en su totalidad dicha conferencia de prensa.

Y, después de California...

Los logros del Movimiento de Juventudes Larouchistas en California y Filadelfia han dado mucho de qué hablar en el Partido Demócrata. Durante la campaña de revocación del mando al gobernador de California, Gray Davis, más de cien jóvenes del movimiento larouchista salieron a las calles a librar la más audaz campaña organizativa, identificando al "hombre–bestia" Arnold Schwarzenegger como una "jugada sucia" del vicepresidente Dick Cheney, y como peón hitleresco al servicio de la oligarquía financiera internacional. Aunque en su conjunto el Partido Demócrata no siguió esta pauta, lo correcto del enfoque de LaRouche quedó demostrado en los lugares en los que estuvo más activo su movimiento de juventudes, como en el gran Los Ángeles, donde la opinión popular pasó de una mayoría de 60 por ciento a favor de la revocación, según encuestas públicas anteriores al referendo, a una mayoría de 51 por ciento en contra en los resultados finales de la elección. El condado de Los Ángeles fue el foco principal de la campaña de los jóvenes larouchistas, que también tuvo un considerable impacto en los entornos de la ciudad de San Francisco.

El demócrata 'no nombrado'

La gira de LaRouche por los estados de Nueva Inglaterra, que incluye dos conferencias universitarias y un gran acto público, ocurre tras una semana de importantes conquistas para su campaña.

El 7 de noviembre, en un programa de diálogo por radio en el estado de Misurí, LaRouche declaró ser el demócrata "no nombrado" que puede derrotar al presidente George W. Bush en las próximas elecciones presidenciales de 2004. LaRouche se refería a una reciente encuesta cuyos resultados indican que todos sus rivales putativos perderían la contienda contra Bush, pero que un "demócrata no nombrado" podría ganarle. LaRouche descartó la idea de que Hillary Clinton pudiese ser ese candidato "no nombrado", señalando que la esposa del ex presidente Bill Clinton sólo ambiciona, si acaso, la candidatura a la Vicepresidencia de los Estados Unidos, como desempate en la convención nacional del Partido Demócrata, estrategia que presupone la derrota electoral de los demócratas en las elecciones de noviembre.

Sus principales ventajas, dijo LaRouche, son dos: primero, sus más de 40 años de pronósticos económicos acertados; y, segundo, la creación de un movimiento de juventudes que se ha fogueado como fuerza eficaz de lucha política, capaz de movilizar a otros sectores de la población para acudir a las urnas.

De hecho, las declaraciones de LaRouche coronaron una semana en la que su campaña cobró fuerzas renovadas, comenzando el 3 de noviembre con la decisión del secretario de Estado de California, Kevin Shelley, de incluir el nombre de LaRouche en la boleta electoral del estado. El Secretario de Estado de California seleccionó a LaRouche como un candidato "ampliamente reconocido" a nivel nacional. Antes, se certificó a LaRouche para las elecciones primarias demócratas de Misurí del 3 de febrero, a pesar del esfuerzo de último minuto que encabezó el el Comité Nacional Demócrata para rechazar su inscripción.

A la certificación en California le siguió la victoria aplastante en las elecciones para la alcaldía de Filadelfia el 4 de noviembre, donde el despliegue del Movimiento de Juventudes Larouchistas le garantizó un margen amplísimo al reelecto alcalde John Street, quien se encontraba bajo ataque de la gestapo del Departamento de Justicia del procurador general John Ashcroft (ver artículo pág. 12). Luego, el 7 de noviembre, LaRouche recibió la certificación para participar en las elecciones primarias de Washington, D.C., el próximo 13 de enero, por parte del Consejo Electoral del Distrito de Columbia. Washington es un foco organizativo del Movimiento de Juventudes Larouchistas, el cual ha llevado a las calles, así como a los pasillos del Congreso estadounidense, la campaña para sacar al belicista vicepresidente Dick Cheney. Por meses, la campaña de LaRouche ha estado patrocinando cuñas en la estación radial de noticias WTOP, la principal del Distrito de Columbia, denunciando a Cheney.

En general, esa fue una semana muy mala para la facción del Comité Nacional Demócrata, que viene llevando a los demócratas a la desaparición, y que ha intentado con desesperación contener a LaRouche, cuya campaña es la única con un movimiento de juventudes significativo y con un probado amplio respaldo entre el 80% de la población estadounidense de menores ingresos.

En Washington, D.C., cinco de los dizque principales candidatos demócratas retiraron sus nombres repentinamente de la boleta electoral, con el pretexto de que las primarias de Washington violan las reglas del partido, una maniobra que el concejal Jack Evans, autor de la legislación para las primarias de Washington, calificó de "cobarde". En tanto que Harold Dean, el puntero nominal de los contendientes demócratas, decidió mantenerse en la boleta, donde competirá contra LaRouche, a quien se conoce como el campeón en la lucha por salvar el Hospital General de Washington, D.C., y contra el asesino sistema médico de las organizaciones administradoras de la salud, o HMO.

A partir del 16 de noviembre, LaRouche iniciaría una gira por la región del Medio Oeste estadounidense, destacando Michigan y Misurí.


Una reportera de televisión entrevista a Lyndon LaRouche el 12 de
noviembre, tras la nutrida conferencia de prensa del precandaidato
presidencial demócrata en Concord, Nueva Hampshire.