Iberoamérica






Resumen electrónico de EIR, Vol.XXIII, núm. 17

Versión para imprimir

Regrese al inicio

Internacional

 

 

Israel: ¿una segunda paz de Madrid o la guerra de Netanyahu?

por Dean Andromidas

Israel ahora se debate entre aceptar el llamado de Yossi Beilin y Lyndon H. LaRouche, de una segunda conferencia en Madrid para lograr una paz global en el Oriente Medio, o prepararse para la próxima guerra. Si opta por la guerra, entonces el presidente del partido Likud, Benjamín “Bibi” Netanyahu, el agente del vicepresidente estadounidense Dick Cheney y los poderes financieros sinarquistas que lo apoyan, asumirá como el próximo primer ministro de Israel, y quizás el último.

No será en Israel donde se decida este debate, sino en Washington, donde el Comité de Acción Política Lyndon LaRouche (LaRouche PAC) moviliza respaldo para una segunda conferencia de Madrid, o “Madrid II”, como primero propuso el ex ministro de Justicia de Israel, Yossi Beilin, en un artículo titulado “La comisión del día siguiente”, publicado por el diario israelí Ha’aretz en su edición del 13 de agosto. En una conferencia telefónica con la estadounidense Alianza Judía por la Justicia y la Paz el 20 de agosto, Beilin dijo que “el Gobierno de Bush no cree en la paz para el Oriente Medio”. Añadió que supuso que a Bush le resultaría atractivo regresar a Madrid, dada su precaria posición política, pero “yo no estoy seguro que lo entiende”.

Israel pudo haber negociado con Siria este año, dijo Beilin, pero Bush lo impidió. “Es la primera vez que un dirigente árabe estaba listo para negociar y Estados Unidos dijo ‘no’ ”. Beilin añadió que, dada la debilidad política no sólo de Bush sino de todos los dirigentes de la región, incluyendo el primer ministro israelí Ehud Olmert, el presidente sirio Bachar al Assad, el primer ministro libanés Fuad Siniora y el presidente palestino Abu Mazen, “debieran hacer algo lo bastante grande para que sirva al interés nacional y salve sus carreras políticas”.

Beilin instó a los “partidarios de la paz, estén donde estén, en Israel, Palestina, en otras partes, en EU, a tratar de impulsar esta cosa grande, y una de las alternativas de esta cosa grande sería tener una segunda conferencia de Madrid”. Añadió: “Mi idea es que impulsemos algo como esto, cosa de que Siria, el Líbano, los palestinos, Israel y, por supuesto, EU, o el Cuarteto, participen en semejante conferencia, y emprendan conversaciones bilaterales entre Israel y Siria, Israel y el Líbano, Israel y los palestinos, y tratar de sugerir que en unos cuantos meses sería posible lograr tratados de paz con nuestros vecinos”. Ante la lúgubre situación que encaramos, dijo Beilin, es crucial ofrecerle a los pueblos de la región y del mundo “un camino que nos aleje de esta tristeza o esta oscuridad, y nos lleve a la esperanza, a la luz. Éste es el dilema”.

Otro que llamó por la paz fue el veterano activista israelí Uri Avnery, dirigente de Gush Shalom. Avnery, en una conferencia telefónica auspiciada por los Demócratas Progresistas de América el 17 de agosto, dijo que EU necesita “cambiar totalmente su política en el Oriente Medio”. El pueblo de Israel sabe que algo anda mal, que Israel no “ganó” la guerra, y el movimiento por la paz tiene que transformar este estado de ánimo en aceptación de una política de paz con Siria, el Líbano y los palestinos, dijo Avnery.

Los llamados para un Madrid II han encendido un debate en el mundillo político israelí. David Kimche, ex director general del Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel y asesor de larga data del presidente del Partido Laborista Amir Peretz, se pronunció a favor de una segunda conferencia de Madrid. En un comentario publicado por el Jerusalem Post el 19 de agosto, Kimche citó a un alto dirigente árabe que le había dicho que, “la única forma de evitar una pesadilla es a través de un proceso de paz global”. Kimche añadió:

“Un político libanés ducho con el cual he venido conversando en días recientes, está convencido que tanto los libaneses como los sirios responderían favorablemente a la idea de una segunda conferencia de Madrid auspiciada por EU, Europa y Rusia. Los sirios están desesperados por salir de su aislamiento internacional y por reparar su economía tambaleante.

“Semejante conferencia de paz puede lograrse. Serían necesarios la iniciativa de EU y el respaldo internacional. Para ‘Madrid I’ James Baker le torció el brazo a los dirigentes de nuestra región, a tal punto que tanto Hafez Assad como Isaac Shamir, ninguno de los cuales quería la conferencia, fueron corriendo a Madrid. ¿Podrían los estadounidenses lograrlo de nuevo? Para mí que esta vez sería mucho más fácil. Sería un gran logro para la política de EU en el Oriente Medio. Sería un salvavidas para el Líbano. Y para nosotros, y es lo que más nos interesa, podría augurar una nueva era total en nuestra atribulada historia con nuestros vecinos.

“Debiéramos favorecerla y hacer lo más que podamos por convencer a EU y a otros de que ‘Madrid II’ sería la secuencia ideal a esa fea guerra en el norte”.

Kimche, quien también era oficial de la Mossad, es un miembro chapado a la antigua del Partido Laborista de la tradición del finado Isaac Rabín, quien, al igual que éste, a la larga llegó a ver la necesidad de que Israel lograra la paz con sus vecinos. Él forma parte de un grupo que está aconsejándole a Amir Peretz que emprenda una iniciativa diplomática, misma que ya resultó en que Peretz emitiera una declaración pública instando a conversaciones con Siria, el Líbano y los palestinos. Dicho llamado le fue transmitido al presidente Assad por el ministro de Relaciones Exteriores de España, Miguel Moratinos, un firme partidario de la paz desde sus días como enviado de la Unión Europea al Oriente Medio.

El presidente del partido Likud Bibi Netanyahu, el simpático agente de Dick Cheney, está listo y esperando para meter a Israel en otra sangrienta guerra sin sentido.

Se abre de nuevo ‘la carpeta siria’

El 21 de agosto Avi Ditchter, ministro de Policía y Seguridad de Israel, quien antes encabezaba la Shin Bet y quien pertenece al gobernante partido Kadima, dijo que sería “legítimo” sostener negociaciones con Siria y el Líbano. “A cambio de una paz verdadera con Siria o con el Líbano sobre estas cuestiones que, desde la perspectiva del territorio, tienen historia, lo que sabemos, y que los sirios saben y los libaneses saben, creo que lo que hicimos con Egipto y con Jordania también es legítimo en este caso”, le dijo a la Radio del Ejército de Israel.

Eso significa regresar a las fronteras internacionalmente reconocidas, dijo Dichter. Sostener conversaciones con Siria es legítimo, y si hay una parte viable del otro lado, las conversaciones deberían darse, y “podrían iniciarse a través de un tercero”. Ditcher dijo que los fracasos anteriores no deberían ser causa de descartar la estrategia de tierra por paz.

La ministra de Relaciones Exteriores de Israel, Tzipi Livni, en efecto volvió a abrir la “carpeta siria” cuando le encomendó a su principal asesor, Yaakov Dayán, elaborar un informe sobre la posibilidad de entablar negociaciones con Siria. Dayán ya se reunió con el catedrático de la Universidad de Tel Aviv Iramar Rabinovich, quien encabezó el equipo que negoció con Siria durante el Gobierno del primer ministro Isaac Rabín. Se esperaba que Dayán se reuniera con el general retirado Uri Sagi, quien ocupó el mismo cargo durante el Gobierno del primer ministro Ehud Barak. Sagi criticó la guerra en el Líbano y llamó a reentablar las negociaciones con Siria.

Sin embargo, el primer ministro Ehud Olmert le echó un balde de agua fría a la propuesta el mismo día en que Ditcher la hizo. “Recomiendo no dejarnos llevar por ninguna promesa falsa”, dijo Olmert. “Cuando Siria deje de apoyar el terror, cuando deje de darle proyectiles a organizaciones terroristas, entonces negociaremos con ellos contentos. No vamos a aventurarnos cuando son partidarios del terror. No vamos a entablar negociaciones hasta que se den pasos básicos que sirvan como base para cualquier negociación”. Apegándose a la línea del Gobierno de Bush, Olmert llamó a Siria “el miembro más agresivo del eje del terror. Yo sería el último en decir que quiero negociar con Siria”.

El viceprimer ministro Shimon Perez también trató de enterrar la propuesta, so pretexto de que los sirios no andan en serio. “Si los sirios anduvieran en serio, deberían venir y decir ‘estamos interesados en sostener negociaciones’. Yo no veo que Assad haga eso”.

No es hora de ilusiones

No debe haber ilusiones. Si Madrid II y una solución política son rechazados o saboteados por Dick Cheney y el desquiciado George W. Bush, entonces la guerra será inevitable. Akiva Eldar, uno de los corresponsales políticos de más peso en Israel, advirtió el 21 de agosto en el diario Ha’aretz: “Será Israel el que pagará el precio por la política simplista de EU de desdeñar” cualquier intento de sostener conversaciones con Siria. La única forma de lograr el apoyo sirio para el cese al fuego de la ONU en el Líbano, advierte Eldar, es que haya una oferta “de EU o de Israel de pagar el precio sabido: poner en práctica la resolución 242 aprobada en junio de 1967 por el Consejo de Seguridad (y la resolución de la Liga Árabe de marzo de 2002) sobre los altos de Golán”.

Advierte Eldar: “La verdad es que en la estela de la guerra con el Líbano, fuentes evaluadoras israelíes también están recomendándole al Gobierno que se aparte de inmediato de la doctrina de ‘ni paz ni guerra’ en el teatro sirio. Le están presentando dos opciones a los dirigentes. Una es la de conversaciones de paz aceleradas con Siria (y con el Líbano), distanciar una alianza sirio–iraní de la frontera de Israel, y cesar de apoyar las organizaciones de resistencia palestina. La otra es una guerra preventiva acelerada contra Siria, antes de que Irán logré equiparse con una bomba nuclear, y antes de que Teherán termine de transformar al ejército sirio en un ejército moderno repleto de todo tipo de armas nuevas.

“Según evaluaciones cautas, este proceso tomará no más de dos años. Por desgracia, en el futuro previsible no tendremos un Gobierno capaz de negociar con Siria, y en EU no hay un presidente que lo haga por nosotros. Por tanto, mantengan limpios los refugios [contra bombas]”.

A no ser que se presione a Olmert a inclinarse por Madrid II, será Bibi Netanyahu quien pondrá en marcha la “guerra preventiva” del juicio final. Olmert está bajo ataque por todas partes. Primero, está la demanda popular de que renuncie, iniciada por los soldados de la reserva que están airados por la debacle en la que los obligaron a participar, y por los dolidos padres de los soldados y civiles que murieron. El propio partido Kadima de Olmert ha sufrido un revés tras otro, incluyendo el enjuiciamiento por agresión sexual de su aliado clave Haim Ramón, quien se vio forzado a renunciar de su cargo como ministro de Justicia. El mismo Olmert es investigado por la Contraloría de Israel por posible soborno, lo que podría resultar en un proceso y el fin de su carrera política.

El primer ministro israelí Ehud Olmert se apega a la línea de Cheney y Bush, no importa lo que digan los israelíes cuerdos: Siria es “el miembro más agresivo del eje del terror. Yo sería el último en decir que quiero negociar con Siria”. (Foto: www.fierj.org.br).

En medio de rumores de elecciones prematuras, la campaña de reclutamiento del Kadima de Olmert ha resultado un fracaso. Sólo semanas antes que Kadima tenga que presentarle su lista de miembros a la comisión electoral, apenas ha logrado reclutar unos 15.000. La mayoría de los activistas, en especial los alcaldes que sacaron los votos para Kadima, están reincorporándose a sus antiguos partidos, y en particular al Likud de Bibi. Existe la posibilidad muy real de que Kadima mismo se desintegre, y que muchos de sus miembros en el Knesset regresen a su “casa” en el Likud y a los brazos de Bibi.

La amenaza más inmediata es que se escinda la coalición gobernante si el presupuesto no es aprobado por el Knesset. Algunos miembros laboristas del Knesset ya anunciaron que no pueden respaldar el presupuesto, porque incluye una reducción de dos mil millones de shekels en programas sociales para pagar la guerra.

El fascista Netanyahu hace su movida

A falta de una iniciativa de paz amplia respaldada por EU y la comunidad internacional, la debacle del Líbano está llevando al electorado israelí a la derecha, y creando un clima favorable para Netanyahu. Los observadores políticos de Israel no sólo ven a Likud ganando terreno sino a su presidente, Netanyahu, asumiendo el cargo de primer ministro. Para Netanyahu y sus partidarios sinarquistas esto se vislumbra muy claro, por lo que están tratando de capturar la protesta de los soldados de reserva y padres dolientes, que han estado sosteniendo manifestaciones frente al despacho de Olmert para exigir su renuncia y la del ministro de Defensa y jefe del estado mayor Dan Halutz.

Fuentes políticas israelíes señalan que esto es típico de la política israelí, que un movimiento de protesta se organiza en torno a una causa aislada y plantea una demanda limitada; no se toma en cuenta el hecho de que el Gobierno pudiera caer, con todo lo que ello implica. No obstante, el clima que está creándose favorece a Netanyahu.

Una fuente comentó lo interesante que fue ver la primera manifestación en Jerusalén realizada por “veteranos de la guerra de 1948”, quienes salieron a expresar su solidaridad con la guerra. A estos veteranos los encabezaba nada menos que Daniel Doron, un librecambista radical que es asesor clave de Netanyahu. Aunque la fuente recalcó que Doron no controla a este movimiento, su presencia señala quién busca manipularlo y con qué propósito.

Doron no sólo lleva a Netanyahu, sino directamente a George Shultz. Doron es el director del Centro para el Progreso Social y Económico de Israel, el cual fundó en 1983 como parte de la campaña del entonces secretario de Estado de EU, George Shultz, para que Israel se convirtiera en un paraíso librecambista o enfrentara el derrumbe económico. El cofundador del centro fue el finado Herbert Stein, quien, junto con Stanley Fischer, ahora gobernador del Banco de Israel, personalmente sirvió como sicario económico de Shultz en 1983, cuando forzó a Israel a aceptar reformas radicales de libre mercado que desmantelaron el Estado de bienestar social.

Entre la junta de gobernadores del centro se cuenta Irving Kristol, el alto sacerdote de los neoconservadores de EU. En su junta de gobernadores en el Reino Unido se cuentan los inventores del thatcherismo, lord Harris, de High Cross, del Instituto de Asuntos Económicos, y lord Young, de Graffham. También está sir Ronald Cohen, un inversionista de riesgo que fue uno de los principales sostenes financieros de Tony Blair y sus políticas económicas. Cohen se reunió con Ehud Olmert cuando éste era el viceprimer ministro de Ariel Sharon.

Esta misma fuente política dijo: “Mira, Netanyahu es un fascista, y quiere crear un movimiento fascista de esta situación”. Sin un Madrid II, subrayó la fuente, el futuro de Israel no se vislumbra muy prometedor.